La tensión en Europa volvió a escalar tras la incursión de drones rusos en territorio polaco, un acto visto como una provocación directa a la OTAN. En respuesta, Francia y Reino Unido anunciaron nuevas medidas: París desplegará aviones de combate Rafale en Polonia y Londres aumentará la presión económica sobre Moscú.
“La seguridad del continente europeo es nuestra máxima prioridad. No cederemos ante la intimidación de Rusia”, declaró Emmanuel Macron.
El cielo de Polonia bajo vigilancia
En una base aérea polaca, un piloto observa cómo los Rafale franceses aterrizan bajo un cielo gris. Para los habitantes de Varsovia, el rugido de los motores no es solo ruido militar: es un recordatorio de que Europa no está sola frente a la amenaza de Moscú.
El despliegue, coordinado con la OTAN y el primer ministro polaco Donald Tusk, busca reforzar el flanco oriental de la Alianza y enviar un mensaje inequívoco a Vladimir Putin: cualquier agresión tendrá respuesta.
Reino Unido endurece las sanciones
De manera paralela, el primer ministro británico Keir Starmer anunció nuevas sanciones contra Rusia:
- Prohibición a 70 embarcaciones de la llamada “flota en la sombra” que transporta petróleo ruso.
- Bloqueo de 30 personas y empresas vinculadas al suministro de componentes electrónicos y químicos para la maquinaria de guerra rusa.
- Restricciones a firmas con sede en China y Turquía acusadas de apoyar indirectamente al Kremlin.
“La acción internacional es vital para cortar el flujo de efectivo que financia esta guerra ilegal”, afirmó la secretaria de Asuntos Exteriores, Yvette Cooper, en Kiev.
Polonia, Ucrania y la OTAN coordinan defensa
Mientras tanto, el Ministerio de Defensa polaco anunció que trabajará con Ucrania en programas de entrenamiento antidrones, conscientes de que la guerra tecnológica avanza más rápido que la diplomacia.
El primer ministro Donald Tusk fue tajante frente a declaraciones de Donald Trump, quien sugirió que la incursión de drones rusos en Polonia pudo ser un “error”.
“Sabemos que no fue un error. Fue una provocación”, respondió.
Riesgo de un conflicto mayor
El ataque con drones reaviva el temor de que la guerra de más de tres años entre Rusia y Ucrania pueda escalar hacia un conflicto europeo más amplio. Para Macron, Starmer y Tusk, la única manera de evitarlo es demostrar que la OTAN está dispuesta a actuar.
Por ahora, los esfuerzos diplomáticos de Estados Unidos para acercar a Moscú y Kiev a un acuerdo de paz siguen estancados. El escenario internacional permanece en tensión, con Europa reforzando su unidad frente al Kremlin.


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