viernes, diciembre 19, 2025

Yucatán, de los estados con menos personas en las cárceles; muchos sin sentencia

Yucatán se mantiene como una de las entidades con las tasas de población penitenciaria más bajas de todo México. De acuerdo con el Censo Nacional de Sistemas Penitenciarios Estatales 2025, al cierre del año pasado se encontraban recluidas 1,847 personas, de las cuales 1,777 son hombres y sólo 70 son mujeres.

Esto representa una tasa de encarcelamiento de 74.4 por cada 100 mil habitantes, muy por debajo del promedio nacional, que es de 179 personas privadas de la libertad por cada 100 mil habitantes.

El sistema penitenciario en Yucatán sigue siendo mayoritariamente masculino. Las mujeres representan apenas el 3.8% del total de la población penitenciaria en la entidad.

Durante el año pasado, 1,189 personas ingresaron a los centros penitenciarios del estado. De ellas, el 9.3% fueron mujeres, lo que muestra que la tendencia de género en la privación de libertad se mantiene constante.

Robo y narcomenudeo, los delitos más comunes

Los delitos por los que más personas son recluidas en Yucatán están encabezados por el robo, seguido por delitos contra la salud en su modalidad de narcomenudeo y homicidio.

Entre las mujeres que fueron ingresadas, los delitos más frecuentes fueron: robo (22%), delitos contra la salud (14.2%) y homicidio (7.1%). En el caso de los hombres, las causas principales de reclusión fueron: robo (16.3%), delitos contra la salud (10%) y homicidio (11%).

Más del 60% de las personas sin sentencia

Un dato preocupante es que el 60.1% de las personas sin sentencia en Yucatán están en prisión preventiva justificada, mientras que el 39.9% se encuentra en prisión preventiva oficiosa.

Esto significa que muchas personas permanecen privadas de la libertad sin haber recibido aún una condena definitiva, lo que muestra una carga en el sistema judicial que impacta tanto en los derechos humanos como en la operación de los centros penitenciarios.

Paco Marín
Paco Marín
Paco Marín es un periodista egresado en Comunicación y Periodismo por la Universidad Latinoamericana. Su experiencia abarca una amplia gama de temas críticos como salud, política, medio ambiente, infraestructura y educación, lo que le confiere un conocimiento diverso y una perspectiva integral en sus contribuciones. Su formación académica y experiencia práctica fortalecen la fiabilidad y experticia del contenido que genera.
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