El 2024 será recordado como un año de transformaciones profundas en las instituciones mexicanas. Entre las más polémicas se encuentra la reforma que afecta al Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y a la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece).
Una reserva presentada en el último momento por el diputado Ricardo Monreal trastocó el rumbo de estos órganos autónomos, introduciendo cambios que han despertado críticas y dudas sobre su impacto en el marco del T-MEC.
¿Qué dice la reforma sobre el IFT y la Cofece?
Lejos de la fusión que algunos medios sugirieron inicialmente, la reforma propone un nuevo esquema institucional, pero su diseño ha generado más preguntas que respuestas:
- Separación de funciones:
- El nuevo organismo descentralizado asumirá las atribuciones de competencia económica de ambos órganos, pero no las de regulación.
- En telecomunicaciones, la regulación pasará a manos de una “Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones”, que será parte del aparato centralizado.
- Desaparición programada:
- Cinco de los siete órganos afectados por la reforma desaparecerán en un plazo de 90 días, con excepción del IFT y la Cofece, cuya extinción depende de leyes secundarias aún pendientes.
- Autonomía en entredicho:
- Aunque el nuevo organismo descentralizado contará con personalidad jurídica, sigue dependiendo del Ejecutivo, lo que podría violar el capítulo 18 del T-MEC, que exige un regulador independiente en telecomunicaciones.
- Facultades presidenciales inmediatas:
- Hasta que se complete la transición, la presidenta de la República asumirá funciones regulatorias, un movimiento que genera inquietud entre inversionistas y organismos internacionales.
¿Qué implica esto para el T-MEC y la inversión?
La confusión jurídica es el punto más crítico. Con la redacción actual:
- Riesgo de violación al T-MEC:
La subordinación del nuevo regulador al Ejecutivo rompe con el marco de independencia exigido por el tratado comercial. Esto podría desatar disputas internacionales. - Clima de incertidumbre:
La desaparición “inminente pero indefinida” de los órganos autónomos genera un vacío legal que podría frenar inversiones en sectores clave como telecomunicaciones y competencia económica.
¿Qué sigue para el IFT y la Cofece?
El panorama para ambos organismos es incierto. Mientras no se publiquen las leyes secundarias, su operatividad está comprometida. La pregunta ahora es si los comisionados optarán por renunciar en bloque, marcando una postura de defensa de sus principios, o si continuarán operando bajo un esquema que parece diseñado para desmantelarlos paulatinamente.
Un limbo jurídico que afecta a todos
La falta de claridad en la reforma no solo golpea a los organismos autónomos; afecta directamente a los ciudadanos y empresas que dependen de regulaciones claras y eficaces. Además, debilita la confianza en México como un país seguro para invertir y como un socio confiable en acuerdos internacionales.
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