Desde el 7 de septiembre, la oferta pública de adquisición (OPA) de BBVA generó expectación en el mercado financiero español. La intención del banco vasco era expandirse en España y México, aprovechando la presencia de Sabadell en ambos territorios.
Sin embargo, la dirección ejecutiva del Banco Sabadell rechazó la OPA por unanimidad, calificándola de insuficiente y poco atractiva para sus cerca de 196 mil accionistas. El presidente, Josep Oliu, declaró ante medios:
“Esta OPA, que nació muerta, solo le queda una cosa: que la entierren los accionistas”.
Razones detrás del rechazo de la OPA
Sabadell argumenta que la prima ofrecida por BBVA es negativa, lo que implica que aceptar el canje sería perjudicial para sus accionistas. El consejo considera que la oferta infravalora significativamente el proyecto independiente de Sabadell y que la afirmación de BBVA sobre el impulso bursátil de las acciones es “una falacia estadística”.
La entidad catalana también cuestiona las proyecciones de sinergias y riesgos que BBVA presentó, especialmente en sus mercados emergentes como México y Turquía, donde la volatilidad y la depreciación de divisas podrían impactar negativamente en el capital del grupo.
Escenario futuro: posibles mejoras y consecuencias
BBVA aún tiene 10 días para mejorar la oferta antes del 7 de octubre, ya sea aumentando el precio o reduciendo el umbral mínimo de aceptación al 30%. Si se logra un respaldo superior al 30% pero inferior a la mitad de los derechos de voto, se requeriría una segunda OPA íntegramente en efectivo.
Mientras tanto, Sabadell mantiene su estrategia independiente, priorizando la estabilidad y el valor de sus accionistas sobre la presión del mercado y los intentos de adquisición.
Impacto en el mercado financiero español
La noticia ha generado movimientos en la bolsa y debates entre analistas sobre la viabilidad de fusiones en el sector bancario español. La negativa de Sabadell refleja un compromiso con la independencia estratégica y la defensa del valor real de sus acciones frente a ofertas externas.
La operación también pone en evidencia los riesgos que enfrentan los bancos multinacionales al operar en mercados emergentes y la importancia de proteger a los accionistas en escenarios de fusiones o adquisiciones hostiles.
Sabadell apuesta por su proyecto propio
El Banco Sabadell reafirma su posición de no aceptar la OPA de BBVA, defendiendo sus intereses y asegurando la estabilidad financiera de sus accionistas. La estrategia independiente se consolida como la prioridad en un mercado competitivo y globalizado.
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