martes, diciembre 30, 2025

‘Wicked’ y la maquinaria de la mentira: Cómo se fabrica un villano en la era de la post-verdad

Con la segunda parte de la adaptación cinematográfica de ‘Wicked’ en el horizonte de finales de 2025, el fenómeno cultural está en su apogeo. Pero más allá de las canciones icónicas y el deslumbrante mundo de Oz, la historia de Elphaba, la «Malvada Bruja del Oeste», esconde un mensaje aterradoramente relevante: ‘Wicked’ es una clase magistral sobre cómo el poder utiliza la propaganda y la desinformación para transformar a un disidente en un monstruo y a una nación en una turba.

La historia nos reintroduce en un Oz que creíamos conocer, solo para revelarnos que la narrativa oficial que nos contó «El Mago de Oz» era una mentira. La «Malvada Bruja» era, en realidad, una activista idealista, y la «Bruja Buena» era su cómplice pasiva. El verdadero villano era el carismático Mago, un fraude que gobernaba a través del miedo.

«Verde de Envidia»: El Color de la Marginación

Elphaba nace diferente. Su piel verde la convierte en un objetivo instantáneo de prejuicio y exclusión. La historia utiliza su condición no como un simple rasgo de fantasía, sino como una poderosa metáfora de cualquier grupo marginado. El mensaje oculto es cómo la sociedad, instigada por el poder, puede tomar una característica física y convertirla en un símbolo de maldad.

Cuando Elphaba descubre la corrupción del Mago —quien está silenciando a los Animales parlantes, una minoría oprimida— y se niega a colaborar, el régimen no debate sus ideas; ataca su identidad. A través de una campaña de desprestigio liderada por Madame Morrible, la secretaria de prensa del Mago, cada acto de resistencia de Elphaba es tergiversado y presentado como un acto de pura maldad. Su intento de salvar a un león de la tortura se convierte en la historia de que «es tan malvada que ni los leones se atreven a morderla».

Una Lección para la Era de las Fake News

Lo que hace a ‘Wicked’ tan potente en 2025 es su reflejo de nuestra propia era de post-verdad y polarización. La historia demuestra con una claridad devastadora cómo funciona la propaganda:

  1. Identificar un «otro»: Encuentra un grupo o individuo que sea diferente.
  2. Crear una narrativa simple: Asocia esa diferencia con una amenaza. «Ella es diferente, por lo tanto, es peligrosa».
  3. Repetir la mentira: Usa todos los canales de comunicación para difundir la narrativa hasta que se convierta en «verdad» aceptada.
  4. Movilizar a la turba: Una vez que el «monstruo» ha sido creado, el pueblo mismo se encargará de perseguirlo, sintiéndose virtuoso al hacerlo.

‘Wicked’ nos obliga a cuestionar las narrativas que consumimos. Nos pregunta: ¿cuántos de los «villanos» de nuestra propia sociedad han sido fabricados por aquellos en el poder para desviar la atención de su propia corrupción? La historia de Elphaba es un recordatorio eterno de que la historia la escriben los vencedores, pero la verdad, a menudo, yace con los marginados. Y esa es una lección que va mucho más allá del camino de baldosas amarillas.

Georgina Balam
Georgina Balam
Georgina Balam es nuestra editora experta en la sección de Espectáculos y Entretenimiento. Con una sólida experiencia en la creación de contenido digital, se distingue por ofrecer información veraz y oportuna a nuestra audiencia. Su conocimiento y autoridad en la industria del entretenimiento aseguran que nuestros lectores reciban las noticias más fiables y actualizadas.
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