Las fiestas decembrinas suelen presentarse como una época mágica, pero para muchas mujeres representan agotamiento y estrés. Decorar, cocinar, organizar, cuidar y anticipar necesidades no son tareas que surgen naturalmente; son parte de un sistema que desde niñas les asigna la responsabilidad de ser las “precuponas” del hogar.
Un informe del INEGI revela que 3 de cada 4 personas encargadas de cuidados en México son mujeres, y muchas reportan fatiga física y emocional. Estas responsabilidades no solo consumen tiempo, sino que también afectan la salud mental, especialmente en épocas de alta demanda como el Maratón Guadalupe-Reyes.
¿Qué es la carga mental y por qué afecta más a las mujeres?
El concepto de carga mental engloba el trabajo invisible de anticipar, organizar y supervisar las tareas del hogar. A esto se suma el “trabajo cognitivo”, término acuñado por la socióloga Allison Daminger, que describe cómo las mujeres no solo ejecutan tareas, sino que también asumen la responsabilidad de prever y resolver problemas familiares.
Durante las fiestas, esta carga se intensifica:
- Planificar reuniones: Definir menús, coordinar horarios y decorar espacios.
- Cuidar a las visitas: Asegurar que familiares y amigos estén cómodos y bien atendidos.
- Supervisar a los niños: Anticiparse a sus necesidades mientras disfrutan de las festividades.
El impacto invisible: salud física y emocional
La carga mental y el estrés relacionado con el trabajo doméstico tienen efectos graves:
- Burnout emocional: Sensación de agotamiento extremo, especialmente durante la época decembrina.
- Problemas de sueño: Muchas mujeres duermen menos para cumplir con sus responsabilidades.
- Trastorno Afectivo Estacional: Cuatro de cada cinco casos afectan a mujeres, intensificando la fatiga emocional en invierno.
La corresponsabilidad como solución para 2025
El cambio empieza con pequeños pasos:
- Dividir las tareas: Distribuir responsabilidades de forma equitativa entre todos los miembros del hogar.
- Romper estereotipos: Cuestionar la idea de que las mujeres deben encargarse de la casa por “naturaleza”.
- Hablar de la carga mental: Visibilizar este trabajo invisible para generar conciencia en la familia y la sociedad.
- Celebrar en equipo: Transformar las festividades en un esfuerzo conjunto, donde todos contribuyan.
Hacia un año nuevo con menos estrés y más igualdad
El fin de año es un momento perfecto para reflexionar sobre los roles en el hogar y cómo avanzar hacia la corresponsabilidad. Reconocer y redistribuir las tareas no solo alivia la carga de las mujeres, sino que también crea familias más unidas y equitativas.
En 2025, que cada uva de fin de año sea un propósito para construir un hogar más justo.
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