Cuando Netanyahu tomó la palabra en la Asamblea General de la ONU, la sala estaba prácticamente vacía. Decenas de delegados de distintos países abandonaron sus asientos como señal de protesta por la guerra en Gaza, dejando solo a uno de los discursos más esperados de la semana de alto nivel.
Boicot diplomático sin precedentes
No está claro si la ausencia de los delegados fue planificada previamente, pero cerca de un centenar de diplomáticos se pusieron de pie y abandonaron la sala. Este gesto refleja la creciente presión internacional sobre Israel y cuestiona la política de Netanyahu respecto al Estado palestino.
https://platform.twitter.com/widgets.js🔴 URGENTE. Numerosas delegaciones abandonan la sala de la Asamblea General de la ONU cuando el primer ministro de #Israel @netanyahu entraba en la sala para su discurso#UNGA80 #UNGA pic.twitter.com/Ftpv9YlLjB
— Noticias ONU (@NoticiasONU) September 26, 2025
Apoyo local a Netanyahu en medio de la protesta
Mientras tanto, grupos de israelíes y judíos, reconocibles por sus kipas y lazos amarillos en apoyo a los rehenes, ocuparon los balcones de la Asamblea para aplaudir y vitorear al primer ministro. Sus expresiones de apoyo buscaban contrarrestar la imagen de los asientos vacíos y proyectar respaldo interno hacia Netanyahu.
Discurso desafiante ante la comunidad internacional
Durante 40 minutos, Netanyahu presentó un mapa de ofensivas en Gaza, Líbano, Irán, Siria, Irak y Yemen, retando a los presentes con un “examen sorpresa” sobre los territorios. Negó categóricamente cualquier genocidio en Gaza y criticó a los países que han reconocido el Estado palestino, calificando su postura de “débil” y “antisemita”.
Protestas ciudadanas en Nueva York
Fuera de la sede de la ONU, en las calles de Nueva York, se organizaron manifestaciones contra la presencia de Netanyahu y la guerra en Gaza. Aunque la ciudad tiene la mayor población judía fuera de Israel, el conflicto ha generado fracturas incluso dentro de la comunidad judía tradicionalmente aliada de Israel.
La escena reflejó un choque entre la diplomacia internacional y la protesta ciudadana: mientras la Asamblea mostraba asientos vacíos, las calles vibraban con pancartas y consignas en favor de los derechos humanos y el fin de la violencia en Gaza.
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