Inflación diciembre sorprendió positivamente a los consumidores mexicanos en la primera quincena del mes, justo antes de las celebraciones navideñas. Inflación diciembre mostró una desaceleración mayor a la esperada y trajo consigo una reducción de precios en productos básicos como jitomate, huevo y pollo, lo que para muchos hogares representó un respiro en el gasto cotidiano tras meses de presión inflacionaria.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró una tasa anual de 3.72% en los primeros 15 días de diciembre, por debajo del 3.99% observado en la quincena previa y menor a lo anticipado por el mercado.
Inflación a la baja en la primera quincena de diciembre
El comportamiento de la inflación diciembre fue especialmente relevante porque se dio en una temporada donde tradicionalmente los precios tienden a subir debido a la alta demanda por las fiestas de fin de año. En términos quincenales, la inflación fue de apenas 0.17%, cuando los analistas esperaban un dato cercano a 0.30%.
Gabriela Siller, economista en jefe de Banco Base, destacó que se trata de la menor inflación quincenal para un periodo similar desde 2021, lo que confirma una moderación en los precios de diversos productos, particularmente en el sector agropecuario.
Por su parte, Banamex explicó que el dato “sorprendió a la baja” debido a menores aumentos en servicios turísticos, mercancías no alimenticias y, sobre todo, a una caída más pronunciada en productos del campo.
Los 10 productos que más bajaron de precio
Uno de los factores clave detrás de la desaceleración de la inflación diciembre fue la reducción en los precios de alimentos y artículos de consumo frecuente. Estos fueron los 10 productos que más bajaron de precio en la primera quincena del mes:
- Calabacita (-10.62%)
- Chile serrano (-7.80%)
- Papaya (-6.58%)
- Jitomate (-4.84%)
- Plátanos (-3.21%)
- Otras verduras y legumbres (-3.52%)
- Huevo (-2.50%)
- Productos para el cabello (-1.20%)
- Pollo (-0.95%)
- Detergentes (-0.71%)
La baja en jitomate, huevo y pollo, productos esenciales en la dieta mexicana, fue especialmente significativa, ya que estos alimentos suelen tener un impacto directo en el gasto semanal de los hogares.
Alimentos frescos, clave en la desaceleración
El descenso en los precios de frutas y verduras respondió, en gran medida, a una mayor oferta agropecuaria y a condiciones climáticas más favorables en algunas regiones productoras. Estos factores permitieron que los precios se ajustaran a la baja tras meses de volatilidad.
Además, el comportamiento de los alimentos frescos ayudó a compensar incrementos en otros rubros, evitando que la inflación general repuntara en una temporada de alto consumo.
Lo que sí subió: transporte y turismo
Aunque la inflación diciembre dio señales positivas, no todos los precios bajaron. Algunos servicios registraron aumentos importantes, principalmente aquellos ligados a la temporada vacacional:
- Transporte aéreo: +38.25%
- Servicios turísticos en paquete: +9.02%
Estos incrementos son habituales en diciembre debido a la alta demanda; sin embargo, especialistas subrayaron que las alzas fueron menores que las registradas en el mismo periodo de 2024, lo que también contribuyó al mejor desempeño inflacionario.
Inflación subyacente, el foco de atención
Pese a las buenas noticias en la inflación general, los analistas advirtieron que la inflación subyacente —que incluye alimentos procesados, bebidas, tabaco, vivienda y servicios— continúa elevada. Este indicador ha permanecido por encima de 4% durante 14 quincenas consecutivas, lo que representa un riesgo para el mediano y largo plazo.
Gabriela Siller alertó que, debido a este comportamiento, “es muy probable que la inflación general se ubique por encima de 4% en los primeros meses de 2026”, especialmente si se presentan choques en servicios o energéticos.
Un respiro temporal para los consumidores
La inflación diciembre ofreció un alivio momentáneo al bolsillo de los mexicanos, particularmente en productos básicos que forman parte del consumo diario. No obstante, los expertos coinciden en que este descenso no garantiza una tendencia sostenida a la baja.
El reto para 2026 será contener la inflación subyacente y evitar nuevos repuntes que vuelvan a presionar el poder adquisitivo. Por ahora, la baja en precios de alimentos esenciales deja una señal positiva y una oportunidad para que las familias enfrenten el cierre de año con un poco más de margen financiero.
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