Asia es un hervidero de actividad geopolítica este 7 de junio de 2025: Japón reporta «progresos» en cruciales negociaciones arancelarias con EEUU, mientras el análisis de la reciente crisis India-Pakistán revela profundas implicaciones para la estabilidad regional y los lazos con potencias como China y Canadá, en un contexto de creciente asertividad de Pekín.
El panorama geopolítico de Asia se muestra particularmente dinámico y complejo este 7 de junio de 2025. Mientras Japón y Estados Unidos avanzan, aunque con cautela, en negociaciones comerciales vitales, las réplicas de la reciente y severa crisis entre India y Pakistán continúan sintiéndose, exponiendo la fragilidad de la paz regional y el persistente espectro nuclear. Todo ello se desarrolla bajo la sombra de una China cada vez más asertiva, cuyas acciones están reconfigurando alianzas y poniendo a prueba el orden internacional.
Negociaciones clave Japón-EEUU: Avances en la guerra arancelaria
Tokio comunicó este sábado progresos significativos en la quinta ronda de conversaciones con Washington, destinadas a aliviar la carga de los aranceles impuestos por la administración del presidente estadounidense Donald Trump. No obstante, ambas partes admitieron que «aún no se ha encontrado un punto de acuerdo» definitivo.
Las negociaciones son cruciales para Japón, que busca la eliminación de un arancel base del 10% aplicado a la mayoría de las naciones, además de gravámenes más elevados sobre sectores industriales clave como el automotriz (25%), el acero y el aluminio. A esto se suma un arancel «recíproco» adicional del 24% específicamente para Japón, anunciado en abril y actualmente en pausa hasta principios de julio.
Ryosei Akazawa, ministro japonés de Revitalización Económica y principal negociador comercial, se reunió el 6 de junio en Washington con el Secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, y otros altos funcionarios.
Akazawa expresó su esperanza de sellar un pacto «lo antes posible», especialmente ante la inminente cumbre del G7, que comenzará el 15 de junio en Canadá, y donde se espera una reunión bilateral entre el Primer Ministro japonés, Shigeru Ishiba, y el Presidente Trump. La economía japonesa, que se contrajo un 0.2% en el primer trimestre de 2025, siente la presión de estos aranceles, particularmente en su vital sector automotriz.
Estas negociaciones arancelarias trascienden lo meramente económico. Representan una prueba de fuego para la alianza Japón-EEUU en un momento de reajuste de las cadenas de suministro globales y de la política de «America First» de Washington.
Un acuerdo exitoso podría cimentar la cooperación bilateral frente a la creciente influencia de China. Por el contrario, un fracaso podría tensar la relación y empujar a Japón a una mayor diversificación de sus lazos estratégicos y comerciales, alterando potencialmente su postura en la región Indo-Pacífico.
Crisis India-Pakistán: Secuelas, riesgo nuclear y el factor Khalistan
Un análisis detallado publicado este 7 de junio sobre la crisis militar entre India y Pakistán de mayo de 2025 revela la gravedad de un enfrentamiento que fue el más intenso entre ambas potencias nucleares desde 1971.
El conflicto, desencadenado por un ataque terrorista en Cachemira administrada por India, escaló rápidamente con ataques aéreos, el uso de misiles y, por primera vez en un combate indo-pakistaní, el despliegue de drones por ambas partes.
De forma alarmante, un misil indio impactó cerca de centros de control nuclear paquistaníes en Rawalpindi, subrayando el peligroso coqueteo con el umbral nuclear. La crisis, que duró cuatro días, fue finalmente contenida gracias a la mediación de Washington.
El informe también destaca cómo la cuestión del Khalistan, un movimiento separatista sij, resurgió con fuerza durante el conflicto. Pakistán acusó a India de utilizar drones para atacar a sijs en Nankana Sahib (acusación negada por Nueva Delhi), mientras que grupos pro-Khalistan hicieron llamamientos a la deserción de soldados sijs en el ejército indio. India, que considera a los partidarios del Khalistan como terroristas, ha señalado a Canadá como un «refugio seguro» para estos grupos, lo que ha exacerbado las ya tensas relaciones diplomáticas entre Nueva Delhi y Ottawa.
Las reacciones de otras potencias fueron variadas: China expresó «pesar» por la operación militar india y preocupación por la situación, mientras que Rusia condenó el terrorismo y llamó a la desescalada.
La crisis de 2025, aunque breve, ha dejado una profunda cicatriz, demostrando la persistente fragilidad de la paz en el Subcontinente. El riesgo de una escalada nuclear, aunque contenido esta vez, sigue siendo una amenaza latente que preocupa a la comunidad internacional.
«El umbral para una guerra total entre India y Pakistán es el más bajo que jamás haya existido en nuestra historia.» – Bilawal Bhutto-Zardari, ex ministro de Relaciones Exteriores de Pakistán, advirtiendo sobre la precariedad de la situación.
La influencia creciente de China y la respuesta de las potencias
El asertividad de China continúa siendo un factor determinante en la geopolítica asiática. Sus patrullas militares en el Mar de China Meridional y la creciente presión sobre Taiwán son vistas con preocupación por las potencias regionales y globales.
Las relaciones entre China e India permanecen tensas; Nueva Delhi considera a Pekín un actor clave en su rivalidad con Pakistán, especialmente tras el uso de aviones de combate de fabricación china por parte de Islamabad en el reciente conflicto. A pesar de ello, diplomáticos de India y China se reunieron el 6 de junio para discutir los lazos bilaterales.
En respuesta a la postura china, Estados Unidos y sus aliados están reforzando su cooperación. Los ministros de defensa de EEUU, Japón, Australia y Filipinas expresaron recientemente su inquietud por las acciones de Pekín y se comprometieron a una mayor colaboración en materia de seguridad. El secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, fue enfático al señalar la amenaza que representa China durante el Diálogo de Shangri-La.
En este complejo tablero, la ASEAN busca mantener un rol central en la promoción de una arquitectura de paz regional. Curiosamente, Pakistán ha renovado sus esfuerzos para convertirse en socio de diálogo pleno de la ASEAN, una cuestión que será discutida por los líderes del bloque.
Asia es, sin duda, el escenario de una intrincada competencia estratégica multipolar. La creciente influencia china está impulsando a otras naciones a fortalecer sus alianzas y buscar contrapesos, mientras organizaciones como la ASEAN intentan navegar estas turbulentas aguas manteniendo su cohesión y relevancia.
TE PODRÍA INTERESAR