El mercado de fichajes tiembla con una posible bomba: Rodrygo Goes, la perla brasileña del Real Madrid, podría hacer las maletas rumbo a Anfield. El Liverpool prepara una oferta de €90 millones, y la sombra de Kylian Mbappé planea sobre esta operación. ¿Estamos ante la primera víctima colateral del huracán francés en Chamartín?
La llegada de Kylian Mbappé al Real Madrid no solo promete goles y espectáculo, sino que también agita las aguas internas del vestuario blanco. Uno de los nombres que ha saltado a la palestra es el de Rodrygo Goes. Según informes recientes, el Liverpool está preparando una ofensiva de €90 millones (unos £75 millones) por el delantero brasileño.
Este movimiento se produce en un contexto donde el Real Madrid, tras el fichaje galáctico de Mbappé, podría necesitar «equilibrar cuentas» y gestionar lo que algunos llaman un «exceso de opciones de ataque».
Rodrygo: ¿De promesa galáctica a excedente de lujo por culpa de Mbappé?
La situación de Rodrygo en el Real Madrid es, cuanto menos, intrigante. A pesar de su indudable talento, su juventud (23-24 años) y sus contribuciones clave en noches europeas, la competencia en la delantera madridista será feroz con la incorporación de Mbappé, sumada a la presencia de Vinicius Jr. y otras figuras.
La preferencia de Rodrygo por jugar en la banda izquierda, posición que también es el hábitat natural de Vinicius y donde Mbappé puede desenvolverse con soltura, complica aún más su encaje como titular indiscutible.
¿Está el Real Madrid realmente dispuesto a desprenderse de un jugador con la proyección de Rodrygo? O, ¿es esta una filtración interesada para medir el mercado, presionar al jugador o incluso renegociar sus condiciones? No hay que olvidar que Michael Edwards, arquitecto de grandes fichajes del Liverpool, ya intentó llevarse a Rodrygo a Anfield en 2017, cuando el brasileño era apenas un adolescente.
La posible venta de Rodrygo no sería solo una decisión económica o táctica; simbolizaría la implacable jerarquía que impera en un club de la magnitud del Real Madrid. La llegada de una superestrella como Mbappé, por definición, desplaza a otros, sin importar su valía o sus servicios prestados.
Si Rodrygo no tiene garantizado un rol protagónico, su valor de mercado podría estancarse o incluso disminuir si pasa demasiado tiempo en el banquillo. Venderlo ahora, en la cresta de la ola y por una cifra considerable, podría ser visto por la directiva blanca como un movimiento pragmático. Informes incluso sugieren que Rodrygo estaría «causando revuelo con sus demandas» en el club, lo que podría acelerar su salida.
Liverpool al acecho: ¿Reconstrucción ofensiva o golpe de oportunidad?
El interés del Liverpool no es casual. Se rumorea que el club de Anfield podría estar planeando una reestructuración de su frente de ataque, con las posibles salidas de Luis Díaz y Darwin Núñez en el horizonte.
En este escenario, Rodrygo no solo sería un reemplazo de lujo, sino una pieza clave en la nueva configuración táctica que Arne Slot quiera implantar. La versatilidad del brasileño, capaz de jugar en varias posiciones de ataque, es un activo muy codiciado.
Sin embargo, el Liverpool no está solo en la puja. Clubes como Arsenal, Chelsea y Newcastle también han sido vinculados con el jugador, lo que inevitablemente podría inflar su precio final. Los €90 millones que se mencionan, ¿son un «negocio soñado», como sugiere algún análisis, o una inversión con un riesgo considerable dado el rendimiento a veces irregular de Rodrygo?
Si el Liverpool concreta el fichaje de Rodrygo por esos €90 millones y, paralelamente, logra vender a Luis Díaz por una cifra cercana (se habla de un interés de Al Nassr por €85 millones), la operación podría interpretarse como un magistral «cambio de cromos».
Se refrescaría la delantera con un jugador más joven y con un perfil potencialmente más explosivo, minimizando el gasto neto. Sería una jugada con el sello de Michael Edwards.
El juego de agentes y clubes: ¿Quién mueve los hilos en la sombra?
En este tipo de mega-traspasos, el papel de los agentes es fundamental. Las filtraciones sobre el «descontento» de Rodrygo o sus «demandas» al Real Madrid podrían ser una estrategia de sus representantes para forzar una mejora contractual o para facilitar una salida en condiciones ventajosas para el jugador.
Se ha reportado que Rodrygo está feliz en Madrid y desea quedarse, pero si no entra en los planes del nuevo técnico (Xabi Alonso es un nombre que suena para el futuro, aunque Ancelotti sigue al mando) o si sus minutos se ven drásticamente reducidos, podría forzar un movimiento antes de que su contrato expire en 2028.
El Real Madrid, por su parte, también juega sus cartas. La presión para gestionar una plantilla con tal acumulación de estrellas es enorme. Filtrar una «disposición a vender» puede ser una forma de establecer un precio de salida alto en el mercado o de enviar un mensaje al propio jugador y a su entorno. Es un complejo ajedrez donde cada movimiento está calculado.
El veredicto de este Juez es que la salida de Rodrygo Goes del Real Madrid este verano es una posibilidad muy real. La llegada de Mbappé lo cambia todo. El Liverpool se presenta como un destino atractivo y con capacidad financiera para acometer la operación.
Si Rodrygo busca protagonismo y un proyecto donde ser pieza central, Anfield podría ser su mejor opción. La pregunta es si el Real Madrid está dispuesto a dejar ir a un jugador que, en más de una ocasión, ha demostrado tener ADN blanco. La decisión final tendrá implicaciones profundas para todas las partes involucradas.
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