En diciembre de 2024, la colonia El Paraje, ubicada en Tultitlán, Estado de México, fue rebautizada como «Colonia Cuarta Transformación». Esta decisión, tomada sin consulta vecinal por la presidenta municipal Ana María Castro Fernández, de Morena, generó fuertes protestas. Las calles ahora llevaban nombres simbólicos como “Banco del Bienestar” y “Sembrando Vida”, reflejando los programas insignia del expresidente Andrés Manuel López Obrador.
La falta de consulta y los problemas burocráticos derivados del cambio —como la actualización de documentos oficiales— encendieron la inconformidad de los residentes. Los vecinos cuestionaron no solo la decisión de las autoridades, sino también el uso del espacio público para promover un proyecto político.
La resistencia vecinal: Protestas y lucha legal
Ante la imposición, los vecinos se organizaron rápidamente para expresar su rechazo. El 8 de enero de 2025, retiraron las placas con los nuevos nombres de las calles como acto simbólico, desafiando incluso la presencia de la policía municipal que intentó dispersarlos con gas lacrimógeno.
El conflicto escaló a cortes judiciales, con los vecinos interponiendo un amparo ante el Juzgado Decimoprimero de Naucalpan. Argumentaron que el cambio violaba sus derechos al realizarse sin consulta previa, un principio que debe garantizarse en cualquier decisión que afecte a una comunidad. Como resultado, el juez otorgó una suspensión provisional, congelando temporalmente los cambios.
Los argumentos del gobierno local
La presidenta municipal Ana María Castro Fernández justificó la medida como un paso necesario para regularizar la colonia, que históricamente enfrentó problemas de tenencia de tierras y servicios básicos. Señaló que la intervención del Instituto Mexiquense de la Vivienda Social (IMEVIS) estaba gestionando la entrega de títulos de propiedad a más de 3,000 familias.
Sin embargo, Castro Fernández admitió que no se consultó a los residentes y se justificó diciendo que Morena había ganado en la zona, lo que reflejaba, según ella, apoyo al proyecto de la Cuarta Transformación.
Un antecedente de tensiones históricas
La inconformidad vecinal no surgió de la nada. La colonia El Paraje tiene un largo historial de conflictos con las autoridades municipales, desde desalojos forzados hasta demandas por la falta de servicios básicos. Además, existen cerca de 300 demandas legales en curso relacionadas con la tenencia de la tierra y problemas administrativos, lo que explica la desconfianza hacia el gobierno local.
Casos similares: Movilización ciudadana en México
La resistencia en la Colonia Cuarta Transformación no es un caso aislado. Otros episodios en México muestran cómo las comunidades han defendido su autonomía frente a decisiones impuestas:
- Renombramiento en Veracruz: En 2018, un fallo judicial permitió a una persona transgénero cambiar su nombre sin necesidad de juicio, marcando un precedente de lucha ciudadana por la identidad.
- Propuesta del “Golfo de América” en 2024: La iniciativa del expresidente Donald Trump para renombrar el Golfo de México generó burla y oposición, evidenciando cómo los nombres con carga política pueden desatar controversias.
El impacto del cambio de nombre en la vida cotidiana
Más allá de la política, el cambio de nombre implica costos y complicaciones para los residentes. Actualizar documentos como credenciales de elector, recibos de servicios y escrituras representa un proceso engorroso y, en muchos casos, caro. Además, varios vecinos denunciaron que en oficinas gubernamentales ya no les permiten pagar servicios básicos si no actualizan primero su domicilio al nuevo nombre.
Lecciones aprendidas: Democracia y espacio público
El caso de Tultitlán subraya la importancia de la participación ciudadana en decisiones públicas. Aunque la consulta popular acordada por el juez representa una victoria para los vecinos, el conflicto deja un mensaje claro: las decisiones gubernamentales deben ser transparentes y respetar la autonomía de las comunidades.
Más allá de una cuestión nominal, este episodio refleja un debate sobre el uso del espacio público y el respeto a las identidades locales frente a proyectos políticos nacionales. La “Cuarta Transformación” como nombre de una colonia no solo es una etiqueta; es un símbolo de las tensiones entre imposición y consenso.
Conclusión: Construir comunidad desde el diálogo
La resistencia vecinal en la Colonia Cuarta Transformación es un recordatorio de que la democracia comienza en lo local. La imposición de nombres, decisiones y políticas sin consultar a los afectados genera descontento y erosiona la confianza en las instituciones.
Para evitar futuros conflictos, es fundamental que las autoridades incluyan a las comunidades en la toma de decisiones. Solo a través del diálogo y la transparencia se puede construir una sociedad más justa y participativa.
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