Un operativo conjunto entre la Guardia Nacional y la Fiscalía General del Estado permitió el rescate de 16 niñas y niños víctimas de explotación laboral en Cancún, así como la detención de dos personas presuntamente responsables del delito.
Así lo dio a conocer la gobernadora Mara Lezama durante su programa La Voz del Pueblo, donde agradeció a la ciudadanía, quienes hicieron posible la intervención gracias a la denuncia de este delito.
“Se logró el rescate de nueve niñas y siete niños que eran obligados a trabajar largas jornadas. Algunos tenían apenas siete años de edad, otros eran bebés que vivían con sus madres en condiciones deplorables”, expresó la mandataria.
Según explicó, los menores fueron traídos desde San Juan Cancuc, Chiapas, bajo engaños. Les prometieron vivienda, comida y empleo, pero una vez en Cancún, eran obligados a vender pozol en triciclos durante más de 12 horas diarias, a cambio de solo dos comidas al día y 100 pesos.
Los victimarios, que operaban con al menos 16 triciclos, obtenían ganancias diarias estimadas en 32 mil pesos, mientras que a las familias de origen de los menores apenas se les entregaban 100 pesos.
“Estos pequeñitos eran empujados a la calle, cargando termos de hasta 20 litros. Es inconcebible que alguien pueda lucrar así con su infancia”, comentó la gobernadora Mara Lezama.
El caso fue revelado gracias a una denuncia ciudadana que permitió ubicar los domicilios donde operaba esta red. Durante los cateos se hallaron también bebés de hasta un mes de nacidos y otros menores que vivían hacinados, sin acceso a servicios básicos ni seguridad.
“Hoy estos niños están en libertad. Son víctimas de trata en su modalidad de explotación laboral infantil. Por eso no vamos a parar, vamos a seguir trabajando 24/7”, afirmó la gobernadora.
Lezama también advirtió sobre el uso de redes sociales para enganchar a personas en situación de vulnerabilidad e hizo un llamado a la población a denunciar cualquier caso sospechoso para evitar más tragedias.
“Muchas veces detrás de una supuesta oferta hay un depredador. No saben quién está del otro lado de la pantalla. Tenemos que tener mucho cuidado”, advirtió.
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