Crees que compras jamón, pero podrías estar llevando a casa un producto no regulado y de menor calidad. PROFECO destapa el engaño de varias marcas populares. Te decimos cuáles son y cómo evitar que te vean la cara en el supermercado.
El hallazgo más preocupante de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) es la existencia de un «nuevo sector en el mercado fuera de toda normatividad». Se trata de productos etiquetados como «embutido», «embutido cárnico cocido», «producto cárnico cocido» o «cocido de pavo». Estos se colocan estratégicamente en los mismos refrigeradores que el jamón, con empaques y apariencias muy similares, generando una confusión deliberada.
Según la PROFECO, al no estar regulados por la NOM del jamón, «es posible que contengan cualquier tipo de carne o pasta cárnica». Además, su aporte nutrimental es generalmente inferior al del jamón auténtico.
Las siguientes marcas fueron señaladas por vender productos que no son jamón, bajo etiquetas confusas :
«Hay marcas que pretenden engañar al consumidor haciéndose pasar por jamón, cuando en realidad no lo son.» – Declaraciones de la Procuraduría Federal del Consumidor.
El Engaño Nutricional: Menos Proteína y Más Sodio del Declarado
Alpino Tradicional (Embutido 1 kg)
Aurrera (Embutido cárnico cocido con pavo, 500 g)
Chimex (Embutido cárnico, 396 g)
Kir Lunch (Embutido, 220 g)
Nutri Deli (Embutido cocido de cerdo y pavo, 400 g)
San Antonio (Embutido cárnico, a granel)
Galicia Virginia (Producto cárnico cocido, a granel)
Kir Clásico (Embutido, 1 kg)
Tres Castillos (Embutido cárnico cocido, a granel)
Galy Galicia (Embutido cárnico, a granel)
Bafar Clásico (Embutido cárnico 400 g)
Duby (Embutido 500 g)
Incluso entre los productos que sí se clasifican como jamón, el estudio encontró discrepancias significativas entre la etiqueta y el contenido real.
Marcas con Menos Proteína de la que Anuncian
La proteína es un indicador clave de la calidad del jamón. Estas marcas no cumplen con lo que prometen en su empaque :
Bafar Jamón de pavo Virginia: Declara 12% de proteína, pero en realidad contiene 11.2%.
FUD Jamón de pierna horneado: Declara 12% de proteína, pero su contenido real es de 11%.
Tres Castillos (Embutido cárnico cocido): Declara 9% de proteína, pero solo tiene 8%.
Benji Imitación de jamón 100% vegano: Presenta una de las mayores discrepancias, declarando 34% de proteína cuando solo contiene 28.6%.
Marcas con Más Sodio del que Reportan
El consumo excesivo de sodio es un riesgo para la salud, asociado a la hipertensión y enfermedades cardiovasculares. Estas marcas contienen más sodio del que admiten en su información nutrimental :
Chimex Ibero Barcelona Jamón de Pavo: Declara 950 mg/100 g, pero el análisis encontró 1030 mg/100 g.
Nutri Deli Jamón de pierna horneado: Informa 780 mg/100 g, pero en realidad contiene 1198 mg/100 g.
Zwan Premium de cerdo y pavo: Señala 771 mg/100 g, pero se detectaron 915 mg/100 g.
Galicia Virginia (Producto cárnico cocido): Declara 800 mg de sodio, pero tiene 1,023 mg.
Kir Clásico (Embutido): También tiene más sodio del declarado.
Otras Irregularidades Detectadas
El informe de PROFECO también señaló otras fallas graves :
Menos producto del declarado: Aurrera (Embutido cocido de carne de cerdo y carne de pavo, 500 g) contiene menos producto del que indica su empaque.
Exceso de nitritos: Galy Galicia (Embutido cárnico, a granel) presenta más nitritos de los permitidos por la norma. Los nitritos se usan como conservadores, pero en exceso pueden ser perjudiciales.
Información de grasa incorrecta: Marcas como Bafar (Pavo Jamón Americano y Jamón de Pavo Lunch), Galy Galicia y Duby declaran cantidades de grasa que no corresponden a la realidad.
¿Cómo Protegerse del Engaño? La Guía Definitiva de PROFECO
Ante estos hallazgos, la PROFECO ha anunciado que notificará a la COFEPRIS y a la Secretaría de Agricultura. Se iniciarán procedimientos que podrían llevar a la inmovilización y retiro del mercado de los productos engañosos. Mientras tanto, el poder está en manos del consumidor.
Lee la Etiqueta Detenidamente: No te dejes llevar por la apariencia. Busca la palabra «jamón». Si dice «embutido», «producto cárnico» o «cocido de», no es jamón y no está sujeto a la misma norma de calidad.
Revisa la Clasificación: La NOM establece cinco categorías de jamón basadas en su calidad. De mayor a menor calidad son: Extrafino, Fino, Preferente, Comercial y Económico. Esta clasificación debe estar en la etiqueta y te indica el porcentaje de proteína y la cantidad de fécula (papa, maíz) que contiene.
Compara Ingredientes: El jamón auténtico debe tener como principal ingrediente la carne de pierna de cerdo o muslo de pavo. Desconfía de productos cuya lista de ingredientes inicie con agua, soya o almidones.
Consulta la Revista del Consumidor: El estudio completo está disponible en la edición de julio de 2025. Infórmate antes de hacer tu próxima compra.
La verdad está en la etiqueta, pero solo si sabes leerla. La próxima vez que estés en el pasillo de los embutidos, no compres a ciegas. Tu salud y tu cartera dependen de ello.
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