El arresto de Víctor Manuel Álvarez Puga en Miami, Florida, volvió a centrar los reflectores sobre su vida y la de su esposa, la conductora Inés Gómez Mont, quienes desde 2021 permanecían prófugos de la justicia mexicana. Ambos son señalados por la Fiscalía General de la República (FGR) como responsables de operar una compleja red de empresas fantasma que habría desviado cerca de 3 mil millones de pesos del erario público.
El periodista Luis Chaparro, en su programa Pie de Nota, reveló nuevos detalles del operativo migratorio que llevó a la captura de Álvarez Puga y a la localización del refugio de lujo donde ambos se habían ocultado durante años.
El arresto en Pinecrest: lujo, discreción y un Bentley de 300 mil dólares
De acuerdo con la información difundida, la detención ocurrió en Pinecrest, una exclusiva comunidad del condado de Miami-Dade, conocida por albergar mansiones de celebridades y empresarios internacionales.
Agentes de ICE, US Marshals y Border Patrol realizaron el operativo cuando Álvarez Puga salía de la residencia a bordo de un Bentley valuado en 300 mil dólares. En el interior se encontraba Inés Gómez Mont con sus hijos, quienes —según las fuentes— fueron motivo de una “consideración especial” para evitar su arresto inmediato.
Aunque México había solicitado la captura mediante ficha roja de Interpol, el arresto se ejecutó por irregularidades migratorias y falsedades en su solicitud de asilo político.
Un refugio de lujo en el corazón de Pinecrest
La mansión de la pareja está situada en Rolling Road, dentro de la comunidad Villa Pinecrest, y fue adquirida en agosto de 2021 por 6.3 millones de dólares (unos 126 millones de pesos).
Con una extensión cercana a mil metros cuadrados, la propiedad cuenta con:
- Siete habitaciones y ocho baños.
- Cocina gourmet con isla central y acabados de mármol.
- Gimnasio, home theater para 18 personas y piscina con terraza privada.
- Garaje para siete vehículos y una recámara principal de 150 m².
La decoración refleja lujo y sobriedad, con candiles de cristal, pisos italianos y amplios jardines que garantizaban privacidad. Según registros inmobiliarios, el matrimonio pagaba 48 mil dólares anuales en impuestos prediales.
Propiedades millonarias y una red de empresas fantasma
Además de la mansión de Pinecrest, se atribuyen a la pareja otras propiedades en Miami Beach (La Gorce Island) —una residencia que perteneció a la cantante Cher—, un departamento en Manhattan, y casas en Ciudad de México, Acapulco y San Miguel de Allende.
Las investigaciones de la FGR señalan que estas adquisiciones fueron financiadas con recursos provenientes de contratos simulados con el gobierno federal mexicano, principalmente de la Secretaría de Gobernación, entre 2016 y 2017.
El esquema, documentado por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), incluía empresas fachada, transferencias trianguladas y prestanombres. Se estima que más de 500 millones de pesos se destinaron a inversiones inmobiliarias en México y Estados Unidos.
Lo que sigue para la pareja
Actualmente, Víctor Álvarez Puga permanece recluido en el Centro de Detención Krome North en Miami, mientras se desarrolla su proceso judicial. Su próxima audiencia está programada para el 12 de noviembre, donde se determinará si será repatriado a México.
Por su parte, Inés Gómez Mont enfrenta cargos por falsedad en declaraciones migratorias y delitos fiscales relacionados con la red de empresas fantasma. Las autoridades mexicanas mantienen activas las órdenes de aprehensión y el aseguramiento de bienes vinculados al caso.
Una vida de lujo bajo la sombra del escándaloMientras los procesos legales avanzan, la historia de Inés Gómez Mont y Víctor Álvarez Puga sigue siendo un caso emblemático sobre corrupción, evasión fiscal y ostentación. La mansión de Pinecrest, símbolo de su aparente éxito, se ha convertido ahora en el escenario de su caída: un refugio de lujo transformado en evidencia judicial.
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