Un enfrentamiento armado entre presuntos delincuentes y elementos de Fuerza Civil en la carretera a Monclova, a la altura de Escobedo, dejó un saldo de un agresor abatido y tres personas detenidas. En respuesta, las autoridades desplegaron el «Operativo Muralla» para blindar los accesos a la zona metropolitana.
Un ataque directo contra las fuerzas de seguridad estatales encendió las alertas en Nuevo León este martes. Elementos de la corporación Fuerza Civil fueron agredidos con armas de fuego mientras realizaban labores de investigación en el municipio de Escobedo, lo que desencadenó un enfrentamiento y una contundente respuesta de las autoridades.
El Enfrentamiento en la Carretera a Monclova
Los hechos ocurrieron cuando los oficiales de Fuerza Civil, en conjunto con la Agencia Estatal de Investigaciones, se encontraban realizando indagatorias para localizar a un grupo delictivo. En ese momento, fueron emboscados por sujetos armados que abrieron fuego en su contra.
Los elementos policiales repelieron la agresión, dando lugar a un enfrentamiento que concluyó con el siguiente saldo:
- Un presunto delincuente abatido en el lugar.
- Tres personas más fueron detenidas por su presunta participación en el ataque.
Las autoridades aseguraron un vehículo tipo Jeep, dos armas largas, cartuchos y equipo táctico que pertenecían a los agresores.
La Línea de Investigación: Robo de Combustible
Aunque las investigaciones continúan, la principal línea de investigación que siguen las autoridades apunta a que los agresores estarían vinculados con bandas dedicadas al robo de combustible, conocido popularmente como «huachicol». Esta actividad ilícita ha sido una fuente constante de violencia en varias regiones del país.
«Se presume que los agresores están relacionados con el robo de combustible; sin embargo, las investigaciones continúan en la zona para conocer la causa del ataque». – Informe preliminar de las autoridades.
Respuesta Contundente: El ‘Operativo Muralla’
Un ataque directo a las fuerzas del orden es considerado un desafío a la autoridad del Estado. En consecuencia, la respuesta fue inmediata y de gran escala. Tras el enfrentamiento, Fuerza Civil implementó el «Operativo Muralla», una estrategia de seguridad diseñada para blindar las entradas y salidas del Área Metropolitana de Monterrey.
Este operativo implica un despliegue reforzado de unidades y personal en puntos estratégicos para prevenir la fuga de otros implicados y disuadir nuevos actos de violencia. La rápida y contundente reacción subraya la gravedad con la que las autoridades han tomado este ataque a sus elementos.
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