El senador Gerardo Fernández Noroña informó el viernes que la Fiscalía General de la República (FGR) le asignó escoltas para su seguridad personal, luego del altercado que protagonizó el pasado 27 de agosto con el priísta Alejandro “Alito” Moreno y otros cinco legisladores.
A través de su cuenta en X, el legislador morenista explicó que esta medida es un mecanismo legal de carácter precautorio.
El choque entre Noroña y “Alito”
La disputa comenzó en el Congreso de la Unión, donde ambos senadores se enfrentaron en un episodio de violencia que derivó en denuncias ante las autoridades correspondientes.
Tras conocerse la asignación de escoltas, Alejandro Moreno respondió con dureza en redes sociales:
“Cobarde, ya regresa esos escoltas (servidores públicos) que le cuestan a todos los mexicanos, porque ni los pagas tú. ¡Eres un cínico, un mentiroso y un corrupto! Devuélvelos para que cuiden a la gente, no a ti… que eres un coyón, un cobarde y un vil chillón”.
Fernández Noroña no tardó en responder, acusando a Moreno de ser quien en realidad depende de la protección externa:
“Irás a la cárcel, Alito. Por otra parte, el cobarde es otro, que agrede con cinco pandilleros disfrazados de legisladores priístas y trae dos camionetas blindadas y guardaespaldas con armas largas. Es muy fácil ser ‘valiente’ con los redaños de otros”.
Noroña rechaza resguardo de la Guardia Nacional
El senador también desmintió las versiones difundidas por Óscar Daniel Martínez Terrazas, coordinador del PAN en Morelos, quien aseguró que elementos de la Guardia Nacional custodiaban una propiedad de Noroña en Tepoztlán, Morelos, valuada en 12 millones de pesos.
El legislador aclaró que no cuenta con dicho resguardo y afirmó que, tras dialogar con integrantes de la Guardia Nacional, decidió declinar la protección.
“Lo formalizaré mediante un oficio a la FGR”, puntualizó.
El enfrentamiento entre Fernández Noroña y Alejandro Moreno ha escalado en las últimas semanas del terreno legislativo al mediático y ahora al legal. La asignación de escoltas refuerza el nivel de tensión política que ha rodeado este caso, mientras ambos mantienen su disputa en tribunales y en redes sociales.
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