viernes, diciembre 19, 2025

Sheinbaum asegura que ruptura con Perú no afectará el comercio

La tensión diplomática entre México y Perú volvió a ocupar los titulares tras la reciente decisión del gobierno peruano de romper relaciones diplomáticas con nuestro país. Sin embargo, la presidenta Claudia Sheinbaum fue categórica: los lazos comerciales y consulares seguirán funcionando con normalidad.

Desde Palacio Nacional, la mandataria explicó que la medida peruana no representa un conflicto comercial ni un cierre de fronteras económicas, ya que ambos países continúan formando parte de la Alianza del Pacífico, junto con Colombia y Chile. La relación entre ambas naciones, según explicó, se mantendrá estable en materia económica y de cooperación.

Un conflicto político con raíces humanitarias

La ruptura de relaciones se originó tras el asilo otorgado a la ex primera ministra peruana Betssy Chávez, quien solicitó protección en la embajada mexicana en Lima. México, fiel a su tradición humanista y al derecho internacional, decidió otorgar el asilo tras considerar que existía persecución política.

Esta postura, aunque respetuosa de los tratados internacionales, fue interpretada por el gobierno interino peruano como una injerencia, detonando la decisión de romper vínculos diplomáticos. Para Sheinbaum, la reacción fue “desproporcionada” y responde a tensiones políticas internas de aquel país.

La estabilidad económica, prioridad bilateral

Mientras las embajadas ajustan su nivel de representación, los sectores productivos de ambos países mantienen su actividad habitual. México y Perú tienen acuerdos comerciales sólidos, con un intercambio de productos agrícolas, tecnológicos y energéticos que supera los mil millones de dólares anuales.

Los analistas señalan que las relaciones comerciales no suelen verse afectadas por rupturas diplomáticas temporales, ya que los mecanismos consulares y económicos continúan operando. La instrucción del gobierno mexicano es clara: garantizar que las empresas, inversionistas y exportadores mantengan su confianza y continuidad.

Tradición mexicana de asilo y soberanía diplomática

Desde hace décadas, México ha defendido el derecho al asilo político como un principio de soberanía y respeto a los derechos humanos. Casos históricos, como los de León Trotsky o los refugiados sudamericanos de los años 70, han cimentado una reputación internacional que Sheinbaum busca preservar.

La presidenta reafirmó que su administración no renunciará a esa tradición, aun cuando cause diferencias con otros gobiernos. En su visión, el asilo es un valor humanitario que distingue a México en la región y fortalece su identidad diplomática.

Un futuro de diplomacia y pragmatismo

Aunque las diferencias políticas entre ambos países son evidentes, el enfoque de México será mantener los canales de diálogo abiertos y proteger los intereses de sus ciudadanos en el extranjero.

En este contexto, la mandataria apostó por una diplomacia pragmática, enfocada en los resultados económicos y en la estabilidad regional. La política exterior mexicana buscará equilibrar sus principios humanistas con la cooperación internacional, sin ceder ante presiones externas.

Con esta postura, Sheinbaum busca enviar un mensaje doble: México defiende sus valores, pero también su compromiso con el desarrollo compartido. La ruptura diplomática con Perú, lejos de debilitar la relación, podría abrir un nuevo capítulo de madurez política y respeto mutuo.

Owen Michell
Owen Michell
Owen Michell es nuestro editor especializado en noticias digitales, con un profundo conocimiento en identificar tendencias y desarrollar contenido de consulta. Su experiencia en el panorama digital le permite brindar información relevante y atractiva para nuestra audiencia. Su pericia en el ámbito de las noticias digitales contribuye a la autoridad y actualidad de nuestro sitio.
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