En una sesión maratónica y llena de tensiones políticas, la Cámara de Diputados aprobó la Ley de Ingresos de la Federación 2026, un documento que marcará el rumbo financiero del país. La cifra es histórica: 10 billones 193 mil millones de pesos, es decir, 891 mil millones más que en 2025.
La noticia encendió el debate entre oficialismo y oposición. Mientras Morena, PT y PVEM defendieron la solidez del proyecto, el PAN advirtió sobre los riesgos fiscales y el trato preferencial hacia ciertos sectores. Sin embargo, el dictamen avanzó con 352 votos a favor y 128 en contra, y fue enviado al Senado.
Un nuevo orden fiscal: IVA e ISR bajo la lupa
Uno de los cambios más discutidos fue el ajuste al IVA de las aseguradoras. Según explicó el diputado Reginaldo Sandoval (PT), muchas compañías acreditaban como propio el IVA que cobraban a talleres o hospitales por servicios relacionados con sus asegurados.
Con la nueva disposición, ese “aprovechamiento indebido” —que suma más de 200 mil millones de pesos en litigio— deberá regularizarse. A partir de 2026, las aseguradoras no podrán acreditar ese impuesto y deberán pagar un 10% del monto, lo que se traduce en un pago efectivo de alrededor de 20 mil millones, con una condonación fiscal de 180 mil millones bajo el nombre de “estímulo”.
Aunque la oposición lo calificó como una “condonación disfrazada”, Morena defendió la medida como una negociación fiscal responsable, que permitirá recuperar recursos y mantener estabilidad financiera.
Nuevas reglas para bancos y contribuyentes
El pleno también aprobó que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) establezca nuevas reglas para que los bancos deduzcan el ISR de créditos no recuperables. Esta medida busca aliviar la carga financiera de las instituciones, permitiendo deducir de forma más ágil los préstamos incobrables.
Además, los contribuyentes con créditos fiscales tendrán seis meses para presentar una garantía equivalente al monto de su deuda mediante billete de depósito. Con ello, se busca dar margen financiero a las empresas que enfrentan litigios fiscales, sin paralizar sus operaciones.
Ingresos sólidos y apuesta por programas sociales
El presidente de la Comisión de Hacienda, Carol Antonio Altamirano (Morena), explicó que la Ley garantiza recursos suficientes para programas sociales y obras estratégicas del gobierno de Claudia Sheinbaum.
Se prevé que la recaudación tributaria alcance 5.8 billones de pesos, equivalente al 60% de los ingresos totales, con un aumento de 542 mil millones respecto a 2025. Entre los rubros más destacados figura el impuesto a las importaciones, que crecerá a 254 mil millones de pesos.
Asimismo, se aplicará una tasa preferencial del ISR de 15% a personas físicas o morales que repatrien capitales de procedencia lícita, incentivando la inversión interna.
Por otra parte, el IVA a productos de gestión menstrual, como calzones y discos menstruales reutilizables o desechables, tendrá una tasa cero, reforzando la política de equidad de género.
Un equilibrio entre ingresos, justicia fiscal y desarrollo
La Ley de Ingresos 2026 refleja una búsqueda de equilibrio entre recaudación, crecimiento económico y justicia social. Morena y sus aliados sostienen que el paquete fortalece la inversión pública sin recurrir a deuda, mientras que la oposición insiste en mayor transparencia en los “estímulos” fiscales.
En cualquier caso, el próximo año estará marcado por un desafío central: mantener la confianza económica interna y atraer inversión, al tiempo que se asegura la sostenibilidad de los programas sociales insignia de la nueva administración.
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