En un movimiento estratégico, el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu ordenó pausar “ciertos ataques” ofensivos en la Franja de Gaza, permitiendo únicamente acciones defensivas. La decisión busca preparar el terreno para negociaciones con Hamas, previstas para el lunes en El Cairo.
Aunque la portavoz del primer ministro enfatizó que no hay un alto el fuego oficial, la medida marca un cambio temporal en la dinámica bélica, con la intención de salvaguardar vidas durante las conversaciones diplomáticas.
Impacto inmediato en Gaza
A pesar de la pausa parcial, la violencia no cesó por completo. Durante el sábado, se reportaron ataques aéreos y bombardeos de artillería en distintos sectores de Gaza, dejando al menos 63 víctimas palestinas, según el Ministerio de Salud local. Entre los fallecidos hubo mujeres y niños, mostrando la magnitud del conflicto y la fragilidad de los civiles atrapados en medio de la ofensiva.
El antecedente del ataque de Hamas del 7 de octubre de 2023, que causó la muerte de 1,219 israelíes, principalmente civiles, evidencia la escalada que llevó a Israel a responder con operaciones masivas que, hasta la fecha, han dejado más de 67,000 palestinos muertos según cifras oficiales.
Objetivo de la pausa y negociaciones en El Cairo
La suspensión de ciertos ataques tiene un claro propósito: facilitar las negociaciones de alto nivel que buscan detener la escalada y liberar a los rehenes israelíes en manos de Hamas.
Las conversaciones, respaldadas por mediadores internacionales, abordarán:
- Cese temporal de hostilidades.
- Condiciones para la liberación de rehenes.
- Posibles acuerdos humanitarios en Gaza.
Netanyahu ha instruido al Ejército a actuar únicamente en defensa de soldados israelíes, asegurando que cualquier retirada o modificación de posiciones militares se realizará con máxima cautela, dada la sensibilidad de los movimientos estratégicos.
La situación humanitaria y desafíos diplomáticos
El conflicto ha generado una crisis humanitaria sin precedentes en Gaza, con hospitales saturados y necesidades básicas insatisfechas. La pausa defensiva busca evitar que el número de víctimas aumente mientras se busca una solución negociada.
Expertos en Oriente Medio destacan que el éxito de estas negociaciones depende de la confianza mutua, presión internacional y la capacidad de ambas partes de mantener la calma durante el proceso, evitando incidentes que puedan romper los frágiles acuerdos.
Una oportunidad para reducir la violencia
La decisión de Netanyahu representa un respiro temporal en la ofensiva militar, con la esperanza de abrir una vía diplomática que reduzca el sufrimiento de civiles y permita la liberación de los rehenes. La comunidad internacional sigue de cerca cada movimiento, consciente de que cualquier error podría escalar nuevamente el conflicto.
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