Recientemente, la NASA, a través de su Centro de Estudio de Objetos Cercanos a la Tierra (CNEOS), actualizó las probabilidades de que el asteroide 2024 YR4 impacte en la Tierra. Tras realizar un análisis más detallado, los científicos han reducido la incertidumbre, y ahora estiman que el impacto tiene una probabilidad de tan solo un 2,6%, es decir, aproximadamente una de cada 38 posibilidades.
El asteroide 2024 YR4: ¿Qué tan real es el riesgo?
A pesar de que el riesgo sigue siendo bajo, esta actualización ha generado preocupación entre la comunidad científica. En el último mes, la probabilidad de colisión ha aumentado del 1% a un 2,6%, lo que ha llevado a recalcular las trayectorias posibles. Aunque el asteroide es relativamente pequeño, con un tamaño estimado entre 40 y 90 metros, la NASA asegura que el impacto, si llegara a ocurrir, tendría efectos menores en comparación con asteroides más grandes.
El asteroide 2024 YR4 sigue clasificado con un 3 en la escala de Turín, que mide el riesgo de impacto. Este índice está lejos del nivel más alto de 8, lo que significa que el asteroide no representa una amenaza inmediata, aunque la clasificación sigue siendo importante para futuras observaciones.
Los estudios detallados que cambiaron las probabilidades
Los cálculos más recientes se han hecho posibles gracias a los análisis detallados sobre el brillo del asteroide. Estos estudios permiten a los científicos determinar con mayor precisión el tamaño y la trayectoria del asteroide, lo que ha ayudado a reducir las posibilidades de impacto y mejorar las proyecciones de su comportamiento.
Además, la NASA ha identificado áreas geográficas que podrían estar en riesgo en caso de que el asteroide impacte. Aunque las probabilidades son bajas, más de 100 millones de personas viven en las zonas que podrían verse afectadas por este evento. Este análisis es crucial para la planificación de medidas de seguridad en el futuro.
El futuro del 2024 YR4: ¿Es el final de la amenaza?
Aunque el asteroide se aleja de la Tierra, se espera que desaparezca de la vista en abril, lo que significa que los científicos tendrán que hacer esfuerzos intensivos para recopilar toda la información posible antes de que el asteroide quede fuera del alcance de los telescopios. Esta ventana de oportunidad para estudiar el 2024 YR4 se cerrará hasta el 2028, cuando el asteroide podría regresar a una trayectoria más cercana.
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