Devastación en Laurel County (KY) y St. Louis (MO). NWS confirma tornados EF-2 y EF-3. Gobernadores declaran emergencias y solicitan ayuda federal
Diversas regiones de Estados Unidos se han visto golpeadas por una serie de tormentas. Durante los últimos tres días, un sistema de tormentas de gran intensidad ha generado múltiples tornados, fuertes vientos y granizo de gran tamaño, afectando principalmente a los estados de Kentucky, Missouri y Virginia, aunque también se reportaron incidentes en Wisconsin e Illinois. Hasta la tarde del domingo 18 de mayo, las autoridades confirmaron al menos 28 víctimas mortales: 19 en Kentucky, 7 en Missouri y 2 en Virginia.
Kentucky: Epicentro de la Devastación
Kentucky ha sido el estado más afectado. El gobernador Andy Beshear informó que la mayoría de las 19 muertes ocurrieron en el condado de Laurel, en el sureste del estado. Cientos de hogares han resultado dañados o completamente destruidos, vehículos fueron lanzados por los aires y numerosas familias han quedado sin hogar. En la comunidad de London, en el condado de Laurel, y en Somerset, condado de Pulaski, las escenas son de absoluta desolación, con barrios enteros reducidos a escombros. El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) investiga un probable tornado que azotó London y el aeropuerto London-Corbin, y ha emitido una calificación preliminar de EF-2 para un tornado en el área de Somerset-London. Entre las víctimas de Kentucky se encuentra el Mayor Leslie Roger Leatherman, un bombero con 39 años de servicio, quien falleció mientras respondía a la emergencia.
Missouri y Virginia También Sufren el Embate
En Missouri, la ciudad de St. Louis reportó cinco fallecidos y más de 5,000 viviendas afectadas después de que un posible tornado tocara tierra en el área de Clayton y Forest Park el viernes. Otras dos muertes se registraron en el condado de Scott. En Virginia, las autoridades confirmaron dos decesos a causa del sistema de tormentas. Más de 55,000 personas permanecían sin energía eléctrica el domingo en Missouri y Texas.
Respuesta de Emergencia y Preocupación por la Capacidad del NWS
Los gobernadores de los estados afectados han declarado emergencias y se espera que soliciten ayuda federal para la recuperación. La Secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, ofreció recursos federales. Sin embargo, este desastre ocurre en un contexto de preocupación por la dotación de personal en las oficinas del Servicio Meteorológico Nacional. Informes indican que varias oficinas del NWS en las regiones afectadas o cercanas, como Jackson y Louisville en Kentucky, y St. Louis en Missouri, operan con un número significativamente reducido de personal debido a recortes y vacantes. Esta situación plantea interrogantes críticas sobre la capacidad de la nación para predecir con precisión y alertar eficazmente sobre fenómenos meteorológicos severos, lo que podría tener consecuencias directas en la seguridad pública.
«Estamos trabajando arduamente esta mañana para abordar los trágicos daños y muertes causados por el clima severo. Estamos asegurando opciones de vivienda de emergencia.» – Gobernador Andy Beshear de Kentucky.
Amenaza persistente y desafíos a largo plazo
La pesadilla podría no haber terminado. Los meteorólogos predicen una nueva ronda de «condiciones climáticas peligrosas de varios días» en la región central del país a partir del domingo, con fuertes lluvias, tormentas eléctricas y la posibilidad de más tornados. La recurrencia de tormentas devastadoras en áreas como Kentucky, que sufrió otro evento mortal hace apenas dos meses, subraya la creciente vulnerabilidad de estas comunidades y el inmenso desafío de la recuperación a largo plazo y la construcción de resiliencia frente a desastres climáticos cada vez más frecuentes o intensos.
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