La reciente victoria electoral de Donald Trump en Estados Unidos no solo sacudió el tablero político global, sino que dejó aprendizajes estratégicos. Para la oposición mexicana, los errores y aciertos en esta contienda estadounidense revelan claves que podrían ayudarles a superar la falta de dirección que han mostrado frente al partido oficial, Morena. Veamos qué errores de los Demócratas en EE. UU. y cuáles de las tácticas de Trump podrían ser un espejo de advertencia y guía para los partidos de oposición en México.
1. Datos vs. emociones: la falta de narrativa que conecta con la gente
La campaña Demócrata subestimó un factor fundamental en las campañas exitosas: hablar a la gente en su propio lenguaje y conectar con sus emociones. Si bien la administración de Joe Biden presumió mejoras económicas y sociales con datos, no logró una narrativa lo suficientemente potente para generar en la población la confianza y el entusiasmo que estos logros requerían para traducirse en votos.
En México, los partidos de oposición enfrentan un desafío similar. La coalición opositora se ha basado en datos que, si bien son alarmantes (como 200 mil asesinatos y 35 millones de personas sin acceso a salud), pierden efectividad cuando la narrativa oficial de la “austeridad y cambio” del gobierno actual y su “historia de los otros datos” logran conectar con el electorado. Para una gran parte de la población, los datos crudos no son suficientes: hace falta una narrativa que los emocione, que les hable de un cambio tangible y que les dé razones para querer ese cambio.
Estrategia recomendada: La oposición debe enfocar su narrativa en historias cercanas, en los temas cotidianos de la población y en propuestas tangibles que generen esperanza, haciendo que el electorado se sienta visto y escuchado.
2. El error de centrar la agenda en temas alejados de las necesidades básicas
La agenda de Kamala Harris en EE. UU. tocó temas clave como inclusión, derechos civiles y la lucha contra la corrupción. Sin embargo, muchos votantes, en especial jóvenes y hombres latinos, vieron esta agenda como secundaria frente a problemas cotidianos como el empleo, la inflación y la seguridad económica.
En México, la oposición también ha fallado en este aspecto, al centrar su discurso en la defensa de instituciones como el INE y la Suprema Corte o en temas de corrupción sin ofrecer respuestas claras a las necesidades inmediatas de la población. Por su parte, el gobierno de la 4T ha logrado hacer de los programas sociales y la obra pública sus grandes pilares. Mientras la oposición se enfoca en denunciar costos y errores en proyectos como el Tren Maya, el gobierno está aumentando la contratación y el empleo en el sureste del país, ganándose el apoyo de una población que ve estos beneficios como un logro tangible.
Estrategia recomendada: La oposición necesita una agenda que hable sobre mejorar la calidad de vida de la gente. Es urgente posicionarse en temas de salud, empleo y educación, y presentar alternativas sólidas y claras.
3. No subestimar el peso del sector empresarial
Otro error de los Demócratas fue suponer que, por hablar en privado contra Trump, los empresarios se decantarían por ellos. Sin embargo, estos, bajo presión y con la promesa de beneficios individuales, terminaron alineándose con el candidato que vieron más seguro para sus negocios. Este mismo error lo ha cometido la oposición en México, que ha asumido que el sector empresarial apoyará su causa en contra de Morena, sin darse cuenta de que la relación con el empresariado requiere un enfoque estratégico.
Para empresarios que han enfrentado ataques desde la narrativa oficial de la 4T, Morena ha mostrado también la otra cara, negociando temas de su interés y manteniendo a flote ciertos sectores. La reelección de Claudia Sheinbaum se ha apoyado en estas alianzas estratégicas, por lo que la oposición no debe asumir que el sector privado será aliado natural de sus propuestas sin ofrecer una base de apoyo sólida y atractiva.
Estrategia recomendada: La oposición debe abrir canales de comunicación directos y transparentes con el sector empresarial, ofrecer certidumbre y un plan de crecimiento a largo plazo que sea atractivo para estos sectores.
La importancia de construir una narrativa de esperanza para 2024
Más allá de estos aprendizajes específicos, la reelección de Trump también deja una lección general sobre el poder de la narrativa y la emoción en política. Trump, al igual que Andrés Manuel López Obrador en México, ha capitalizado la narrativa de lucha contra el “sistema”, encarnando a un líder que está del lado del pueblo. En el contexto mexicano, la oposición necesita más que nunca construir un discurso que no solo critique los errores del gobierno actual, sino que inspire y mueva a la gente a creer en una alternativa.
En este 2024, México vivirá una elección trascendental, y los errores de Estados Unidos podrían ser una advertencia para los partidos opositores mexicanos. Lograr emocionar a la gente, ofrecer respuestas claras a sus problemas cotidianos y construir alianzas estratégicas pueden ser claves para recuperar la confianza de un electorado que hoy los ve como una opción débil y fragmentada.
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