La Embajada de Estados Unidos en México anunció que los vuelos de deportación ahora tienen como destino la frontera sur de México, específicamente en el estado de Chiapas, con el objetivo de evitar intentos de reingreso y frenar el tráfico de personas.
A través de un comunicado en redes sociales, la embajada advirtió:
“¡No te dejes engañar por coyotes! Cruzar ilegalmente implica deportación inmediata y definitiva”.
Este ajuste en la estrategia migratoria busca evitar que los deportados intenten cruzar nuevamente desde la frontera norte, obligándolos a regresar a sus países de origen.
Declaraciones de seguridad nacional
Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, reafirmó la postura del gobierno estadounidense en un mensaje contundente:
“Si estás considerando entrar a Estados Unidos ilegalmente, ni siquiera lo pienses”.
Además, enfatizó que la administración mantiene una política de “cero tolerancia” contra la inmigración irregular y continuará endureciendo las medidas de control en la frontera con México.
Deportaciones masivas y su impacto en México
El pasado lunes, 242 migrantes, incluidos mujeres y niños, fueron deportados desde México a Venezuela. Este movimiento forma parte de una serie de acciones implementadas por el gobierno mexicano en respuesta a las restricciones migratorias impuestas por Estados Unidos.
José Antonio Chol Ruiz, representante del Bloque de Organizaciones de Izquierda Siempre, aseguró que la disminución del flujo migratorio se debe a la suspensión de solicitudes de asilo en Estados Unidos y al endurecimiento de las deportaciones.
“Muchos migrantes ahora están optando por regresar a sus países de origen”, comentó Chol Ruiz.
Los efectos ya se notan en Tapachula, la ciudad más grande en la frontera sur de México, donde las largas filas en los bancos y los parques abarrotados han desaparecido en las últimas semanas.
Operativos y despliegue de la Guardia Nacional
El gobierno mexicano ha reforzado los operativos en la frontera sur como parte de un acuerdo con Estados Unidos para contener la migración y evitar la imposición de aranceles.
El despliegue de 10 mil elementos de la Guardia Nacional en la frontera norte también ha influido en la frontera sur, donde las autoridades han intensificado la identificación y detención de personas sin documentos.
Organizaciones defensoras de derechos humanos han expresado su preocupación por la situación de los migrantes varados en Chiapas, quienes enfrentan incertidumbre y frustración ante la imposibilidad de continuar su camino hacia Estados Unidos.
Un panorama incierto
A pesar de las restricciones, expertos advierten que la migración irregular podría estabilizarse en los próximos meses. Mientras tanto, organizaciones han instado al gobierno mexicano a implementar medidas de apoyo para los migrantes en situación de vulnerabilidad.
Estados Unidos y México continúan ajustando sus estrategias migratorias, pero la crisis en la frontera sur sigue siendo un desafío para ambas naciones.
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