La tormenta tropical «Raymond» ha dejado un saldo de afectaciones en al menos cuatro estados del país, aunque hasta la noche del viernes no se reportan víctimas mortales ni heridas graves.
En Guerrero, Zihuatanejo fue uno de los municipios más impactados, con calles inundadas hasta 50 centímetros, vehículos arrastrados y árboles caídos. En Pungarabato, 39 casas se inundaron y nueve sufrieron daños por deslaves, mientras que se habilitó un albergue para atender a 48 familias.
Las carreteras hacia la sierra de Atoyac y Tecpan presentaron cortes y socavones. En la región de la Montaña, los municipios de Atlamajalcingo del Monte e Iliatenco reportaron derrumbes y casas dañadas. En Acapulco y la Costa Grande se suspendieron las clases para garantizar la seguridad de los estudiantes.
Suspensión de clases y medidas preventivas en Colima y Jalisco
En Colima, la educación presencial se suspendió para los turnos vespertinos de todas las escuelas en Manzanillo, así como en comunidades de Armería y Tecomán, implementando clases virtuales. Por su parte, Jalisco detuvo las clases en ambos turnos en municipios costeros como Cabo Corrientes, Puerto Vallarta y Tonila.
La Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos informó que las lluvias ligeras se intensificarán en las próximas horas, por lo que las medidas continuarán hasta que disminuya el riesgo.
Preparativos y alerta en Baja California Sur
En BCS, Los Cabos y La Paz se mantienen en alerta máxima. La Secretaría de Marina despliega mil 500 efectivos y 18 embarcaciones para apoyo y rescate, mientras que la Sedena activó el Plan DNIII con 1,050 elementos en alerta.
Se esperan lluvias de 75 a 150 mm y vientos de hasta 100 km/h. Los alcaldes locales aseguraron la apertura de albergues y recorridos preventivos en zonas vulnerables para proteger a la población. El gobernador Víctor Castro Cosío hizo un llamado a mantener la precaución y atender las indicaciones de protección civil.
Raymond ha demostrado la fuerza de las tormentas tropicales en el Pacífico, dejando daños materiales y alterando la vida cotidiana de varias regiones, aunque las acciones preventivas buscan minimizar riesgos y proteger a los ciudadanos.


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