La tragedia ocurrida el 10 de septiembre de 2025 en el Puente de la Concordia, Iztapalapa, tras la explosión de una pipa de gas, dejó una estela de dolor, pero también mostró un fuerte gesto de solidaridad. Policías, repartidores de aplicaciones, taxistas, vecinos y personal comunitario se coordinaron para llevar comida y víveres a rescatistas, familiares de heridos y de fallecidos.
En los alrededores del lugar del siniestro y en hospitales cercanos, como el Hospital General Emiliano Zapata, ciudadanos y autoridades improvisaron centros de apoyo para quienes aguardaban noticias de sus familiares. Ahí se entregaron alimentos, agua y productos básicos que ayudaron a sobrellevar la espera.
Repartidores de apps se organizaron
Uno de los grupos que más llamó la atención fue el colectivo de repartidores conocido como “Potros”. Ellos utilizaron sus motocicletas y mochilas de reparto para trasladar comida y bebidas tanto al hospital como a la zona cero. Su intención fue clara: “apoyar a las familias que no tienen tiempo ni recursos para buscar alimento en medio de la emergencia”.
Vecinos y comedores comunitarios tras explosión
Los habitantes de colonias cercanas se sumaron de inmediato. Recolectaron agua, guisos caseros y pan, mientras que comedores del Sistema Público de Cuidados de Iztapalapa prepararon alimentos calientes que fueron repartidos a socorristas, policías y voluntarios que trabajaban durante la noche.
Apoyo en hospitales
En el Hospital Emiliano Zapata se habilitó un punto específico para recibir donaciones y repartirlas entre las familias que siguen en espera de información. También en otros hospitales donde se encuentran internados los lesionados, voluntarios y vecinos hicieron llegar víveres y agua.
Las autoridades capitalinas reconocieron la labor ciudadana. Tanto la jefa de Gobierno de la CDMX como la presidenta Claudia Sheinbaum destacaron la unión de la población en momentos críticos: “la colaboración social ha sido fundamental para acompañar a los familiares y dar fuerza a los equipos de emergencia”, expresaron.
La tragedia ha dejado hasta ahora decenas de heridos y fallecidos, pero también un ejemplo de que, ante la adversidad, la solidaridad ciudadana en Iztapalapa se convierte en un pilar de apoyo para quienes más lo necesitan.


TE PODRÍA INTERESAR