Claudia Sheinbaum Pardo sostuvo un segundo encuentro con empresas nacionales y extranjeras, así como con organismos y asociaciones vinculadas a la operación de carga del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), con la intención de afinar estrategias que fortalezcan la infraestructura logística del país. Este tipo de reuniones reflejan la apuesta del gobierno por convertir al AIFA en un pilar clave del comercio y la conectividad en México.

Sheinbaum: Un aeropuerto estratégico para carga y conectividad

Desde su inauguración en 2022, el AIFA ha tenido un crecimiento notable: en sus primeros tres años ha transportado más de 11 millones de pasajeros. Pero, más allá del pasaje, su rol en el transporte de carga ha llamado la atención: desde 2023 se ha convertido en la terminal líder del país en ese rubro.

Las cifras respaldan esa transformación: más de 712 mil toneladas de mercancías movidas a través de sus instalaciones, lo que demuestra su capacidad logística. Además, en 2024 la recaudación por impuestos de comercio exterior vía AIFA superó los 140 mil millones de pesos, una señal del impacto económico que este proyecto tiene para el país.

Autoridades del aeropuerto informaron que, desde el primer trimestre de 2024, las operaciones ya cubren sus gastos con recursos propios, alcanzando un superávit de 448 millones de pesos. También destacaron los empleos generados: alrededor de 15 mil puestos directos y más de 150 mil indirectos, lo que impulsa el desarrollo en zonas aledañas al aeropuerto.

Lo que se discutió en la reunión con empresas de carga

Durante el encuentro, Sheinbaum escuchó los planteamientos de representantes del sector sobre los retos logísticos, aduanales y de operación que aún enfrentan. Entre los temas prioritarios:

• Infraestructura aduanera y almacenes fiscales: varias firmas manifestaron la necesidad de agilizar trámites de comercio exterior, habilitar recintos aduanales y ampliar bodegas de almacenamiento.
• Seguridad y protocolos operativos: sobre todo en la manipulación de mercancías, maniobras de carga y descarga, así como en controles sanitarios y de seguridad para mercancías sensibles.
• Conectividad terrestre: aunque el AIFA ofrece rutas aéreas y aduanas, muchas empresas advirtieron que la conectividad del aeropuerto con la Ciudad de México y el Estado de México debe reforzarse para optimizar la logística de distribución.
• Perspectivas de inversión: ante la creciente demanda, algunas empresas externaron interés por invertir en infraestructura alrededor del aeropuerto —almacenes, centros logísticos, transporte de carga— lo que podría dinamizar la economía local y nacional.

Sheinbaum reafirmó el compromiso del gobierno para consolidar al AIFA como un centro neurálgico de comercio y logística, señalando que el aeropuerto ofrece espacio suficiente, tecnología moderna y servicios aduanales competitivos.

Tensiones y contexto internacional

El impulso al AIFA no ha estado exento de tensiones. Por un lado, la orden presidencial de reubicar operaciones de carga aéreas del saturado Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) hacia AIFA generó controversias —especialmente entre empresas acostumbradas al AICM—. Por otro, algunas aerolíneas internacionales han expresado preocupación por conectividad y logística, dado que el traslado a AIFA implica cambios operativos.

Además, la competencia internacional y las reglas del comercio exterior obligan a que el aeropuerto y las autoridades aduanales ofrezcan certidumbre para atraer operación de carga global, desde manufactura hasta comercio de importación-exportación. Las reuniones como la encabezada por Sheinbaum apuntan a resolver esos desafíos.

Mirando hacia el futuro

Como parte de la agenda, se informó que próximamente habrá una nueva reunión vinculada al Plan Michoacán por la Paz y la Justicia, lo que sugiere que las autoridades buscan articul ar políticas de seguridad, desarrollo e infraestructura logística —algo clave para asegurar que el AIFA opere en un entorno estable y ordenado.

Mientras tanto, las empresas de carga, nacionales y extranjeras, estarán atentas al desarrollo de mejoras en bodegas, aduanas, conectividad terrestre y procesos de comercio exterior. De concretarse las inversiones, podrían generarse nuevos empleos, dinamizar la distribución de mercancías en México y fortalecer la integración del país al comercio global.

El segundo encuentro encabezado por Claudia Sheinbaum con empresas de carga confirma la apuesta del gobierno por posicionar al AIFA como eje logístico central en México. Los datos acumulados —cientos de miles de toneladas movilizadas, recaudación millonaria, miles de empleos generados— evidencian avances concretos. Sin embargo, el éxito dependerá de la capacidad para resolver los retos operativos, aduanales y de conectividad que todavía persisten. Si lo logran, el AIFA podría transformarse en un motor clave para la economía nacional y el comercio internacional.