El gobierno federal avanza en su compromiso de acercar la educación media superior a cada comunidad del país. Para diciembre de este 2025, se completarán 20 nuevos planteles, 33 ampliaciones y 35 reconversiones de secundarias que funcionarán como preparatorias vespertinas. En total, esto representa 44,685 nuevos lugares, distribuidos en 88 acciones de infraestructura educativa.
El objetivo es claro: que cada joven tenga una preparatoria cerca de su casa, ya sea en zonas urbanas con alta densidad poblacional o en comunidades rurales y montañosas. La meta es alcanzar una cobertura educativa del 85% en el nivel medio superior.
Bachillerato Nacional: un modelo unificado
El secretario de Educación Pública, Mario Delgado, explicó que los nuevos planteles forman parte de la primera generación del Bachillerato Nacional, que unifica los 32 subsistemas existentes y busca eliminar desigualdades entre escuelas públicas.
“Siguiendo la instrucción de la presidenta, estamos acabando con esta idea de que hay bachilleratos de primera y de segunda. Todos formamos parte del Bachillerato Nacional”, afirmó Delgado.
Este modelo garantiza que todos los jóvenes tengan acceso a educación de calidad, sin importar su ubicación geográfica.
Inversión histórica y conectividad educativa
La subsecretaria de Educación Media Superior, Tania Hogla Rodríguez Mora, anunció que el gobierno federal invertirá 5,749 millones de pesos en infraestructura para lograr la cobertura del 85%.
Todos los nuevos planteles estarán conectados a internet, permitiendo que los estudiantes accedan a educación híbrida: presencial o a distancia. Esto representa un avance significativo en la modernización de la educación media superior, fortaleciendo la seguridad y la cohesión social en las comunidades.
Distribución de nuevos planteles y telebachilleratos
Los nuevos bachilleratos tecnológicos se ubicarán en ciudades como Tijuana, Escobedo, Celaya, Acapulco y Chetumal, mientras que 52 ampliaciones atenderán escuelas de alta demanda.
Además, se construirán 130 nuevos telebachilleratos, dirigidos a comunidades donde la preparatoria más cercana se encuentra a más de 45 minutos de distancia. Esta estrategia permite cerrar brechas educativas y ofrecer oportunidades a jóvenes que antes enfrentaban barreras geográficas.
Educación que transforma comunidades
Rodríguez Mora enfatizó:
“Una escuela transforma una comunidad. Cuando una joven o un joven estudia cerca de su casa, fortalece la vida social y se siente más seguro. Por eso estamos construyendo donde más hace falta”.El impacto de estas acciones va más allá de la educación: refuerza la cohesión social, mejora la seguridad y brinda nuevas oportunidades de desarrollo local.


TE PODRÍA INTERESAR