La Caravana Migrante “Por la Libertad” enfrenta su primer incidente sanitario serio: un migrante cubano identificado como Adrián, de 27 años, presentó un presunto caso de miasis provocada por la mosca del gusano barrenador.
El joven relató que mientras avanzaba por Mapastepec, sintió un pequeño grano en la pantorrilla que no le dio importancia. Sin embargo, días después, en la comunidad de Hermenegildo Galeana, la lesión se había convertido en una herida infestada de gusanos. Compañeros migrantes le realizaron una curación casera antes de que fuera trasladado al hospital en Pijijiapan tras un desmayo.
Atención médica y apoyo local
El alcalde Carlos Albores Lima se reunió con representantes de la caravana para informar sobre ayuda humanitaria, que incluye agua y atención médica para todos los integrantes, especialmente para Adrián.
“Estoy enterado de todo lo que pasa en temas de salud; pedí atención en el hospital para quien tiene gusano barrenador y otras personas más”, afirmó el edil durante la reunión.
Hasta ahora, la Secretaría de Salud de Chiapas no ha emitido información oficial sobre el caso, generando preocupación entre los migrantes y activistas de derechos humanos.
Dificultades durante la travesía
La caravana ha recorrido 150 kilómetros en diez días, enfrentando altas temperaturas superiores a 30 °C, lluvias intensas y agotamiento físico. Los migrantes han reportado cansancio extremo y enfermedades leves, además de condiciones precarias durante la ruta.
En varias ocasiones, los integrantes han solicitado al Gobierno de la Ciudad de México permisos de tránsito para llegar a la capital y otras ciudades, donde esperan mejores oportunidades de trabajo y continuar sus trámites de regularización.
Demandas de la Caravana Migrante
Los migrantes denuncian maltrato laboral y bajos salarios en la frontera sur, así como la lentitud de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), que no ha resuelto muchos casos pese a más de un año de espera.
La cubana Rebeca García declaró: “Sólo necesitamos un permiso para llegar a nuestro destino, trabajar y ayudar a nuestras familias”.
A diferencia de éxodos anteriores, la caravana prefiere permanecer en México ante la fortalecida frontera con Estados Unidos y las deportaciones masivas impulsadas por la administración de Donald Trump.
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