Tras huir de sus países por violencia, crimen organizado o persecución, los migrantes llegan a la frontera sur de México buscando seguridad y un futuro mejor. Sin embargo, enfrentan graves problemas de salud que complican su trayecto.
Enfermedades más comunes entre los migrantes
En Tapachula, los módulos de la Secretaría de Salud atienden a personas con hipertensión, diabetes, asma, enfermedades respiratorias, gastrointestinales, dermatológicas y estomacales. Además, el estrés, la ansiedad, la depresión y el trastorno de estrés postraumático son frecuentes debido a la incertidumbre y la precariedad.
Historias que reflejan la precariedad
Yamilet Cruz, migrante cubana, llegó con hernias en la columna y comenzó tratamiento médico en Tapachula.
Oscar Hernández, también de Cuba, necesita tratamiento tras la extirpación de un riñón hace 10 años y agradece la atención gratuita en México.
Atención médica gratuita y retos del sistema
David Jiménez Gordillo, coordinador de movilidad de la Secretaría de Salud, indicó que de enero a julio de 2025 se atendió a más de 39 mil migrantes, principalmente de Guatemala, Cuba y Haití. Las enfermedades más comunes son infecciones respiratorias agudas, diarreicas, dermatológicas y lesiones.
Organizaciones civiles y resistencia frente a la crisis
Rossemberg López Samayoa, de la organización Una Mano Amiga, señaló que las políticas migratorias de EE. UU. han dificultado la gestión de recursos. Sin embargo, se realizan pruebas de VIH, sífilis y se distribuyen condones y lubricantes para proteger a la población migrante.
Los migrantes en Tapachula enfrentan una doble lucha: la búsqueda de refugio y la atención a sus problemas de salud. La colaboración entre autoridades y organizaciones civiles es vital para garantizar derechos y bienestar a quienes llegan a México en busca de seguridad y dignidad.
