En un ataque que dejó 10 personas fallecidas y 13 heridas, Querétaro se convirtió en el centro de la atención nacional. Este violento suceso tuvo como blanco a un operador del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), conocido como ‘La Flaca’. Claudia Sheinbaum, presidenta de México, confirmó que el objetivo del atentado fue una persona vinculada a actividades criminales. A medida que surgen detalles sobre ‘La Flaca’ y su vida en redes sociales, el caso continúa generando impacto en la opinión pública y cuestionamientos sobre la seguridad en el país.
La exhibición de ‘La Flaca’ en redes sociales
‘La Flaca’, cuyo nombre real es Fernando González Núñez, no solo se dedicaba a actividades dentro del CJNG, sino que también construyó una vida pública a través de redes sociales. A pesar de que su cuenta de Instagram era privada, su perfil en Threads estaba abierto, donde acumulaba más de 700 seguidores. En este espacio, Fernando compartía tanto su vida sentimental como lujos y armas, con publicaciones que denotaban su pertenencia al “cártel de las cuatro letras”. Fotografiándose con armas largas, chalecos con las siglas «CJNG» y vehículos de lujo, ‘La Flaca’ no escondía su identidad ni sus actividades, lo que da pistas sobre su confianza y el círculo de seguridad en el que aparentemente se movía.
Los lujos de un operador criminal
A través de las publicaciones, ‘La Flaca’ exhibía joyas exclusivas, marcas de lujo como Dolce & Gabbana y vehículos de alto costo, así como viajes. Según reportes de Flight Aware, se presume que Fernando viajó de Houston, Texas, a Querétaro, apenas semanas antes de su muerte. Este estilo de vida atraía seguidores en sus redes, donde publicaba frases sobre el amor, la lealtad y la traición, que iban acompañadas de imágenes de aeronaves y tatuajes distintivos. Cada elemento en sus publicaciones sumaba una imagen de poder y pertenencia a un grupo criminal.
El ataque en Los Cantaritos y el impacto en Querétaro
El 9 de noviembre, ‘La Flaca’ acudió al bar «Los Cantaritos» en Querétaro. Cerca de las 21:30 horas, un grupo de sicarios irrumpió en el establecimiento y abrió fuego. Según fuentes extraoficiales, el principal objetivo de la agresión fue ‘La Flaca’. La masacre resultó en la muerte de 10 personas y dejó heridas a 13 más. Las autoridades detuvieron a un sospechoso, pero aún se desconoce si pertenece a algún cártel.
La presidenta Claudia Sheinbaum confirmó que el ataque estaba dirigido a un individuo específico y destacó la importancia de actuar en conjunto con el gobierno de Querétaro para garantizar la seguridad en la región. El alcalde de Querétaro, Felipe Fernando Macías, indicó que el ataque refleja la violencia que enfrenta el país a nivel nacional, vinculada a organizaciones criminales.
El contexto detrás del CJNG y su presencia en Querétaro
El CJNG es uno de los cárteles más poderosos y violentos de México. La organización ha expandido su influencia en diversos estados y ahora parece incursionar en Querétaro. ‘La Flaca’ formaba parte de esta estructura, presuntamente reclutando sicarios y participando en actividades como el huachicol. Aunque había sido detenido en dos ocasiones por posesión de armas y explosivos, logró quedar en libertad, lo que plantea preguntas sobre el sistema de justicia en México.
La presencia del CJNG en Querétaro, donde no se había registrado violencia de este nivel anteriormente, marca un giro preocupante para las autoridades locales. El caso de ‘La Flaca’ no solo expone la violencia y la actividad de cárteles en zonas menos afectadas por el crimen organizado, sino que también resalta cómo las redes sociales se han convertido en un escaparate para la vida de ciertos operadores criminales, quienes encuentran en estas plataformas un espacio para proyectar su poder y asegurar lealtades.
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