Agustín Elías Ramírez, quien se desempeñaba como director de Cambio Climático en la Secretaría del Medio Ambiente, Biodiversidad, Energías y Sustentabilidad de Oaxaca, fue destituido de su cargo tras difundirse imágenes en las que aparece comiendo huevos de tortuga marina, especie catalogada en peligro de extinción.
El escándalo se desató luego el propio funcionario publicó en su estado de WhatsApp varias fotografías donde se le ve consumiendo al menos una decena de huevos de tortuga. Las imágenes generaron indignación y fuertes críticas en redes sociales, no solo por tratarse de un acto ilegal, sino por provenir de un funcionario público encargado justamente de temas ambientales.
Sanciones por comer huevos de tortuga
De acuerdo con la Ley General de Vida Silvestre está prohibido la recolección, comercialización y consumo de huevos de tortuga marina. Además, el Código Penal Federal establece sanciones de uno a nueve años de prisión y multas de 300 a 3 mil días de salario (medidos en UMAs) para quien participe en estas actividades ilegales.
Al respecto, la secretaria de Medio Ambiente de Oaxaca, Karina Unda Harp, confirmó la remoción de Elías Ramírez y señaló que se abrió una investigación interna para esclarecer la denuncia pública. En un comunicado, la dependencia afirmó que su personal debe apegarse a un código de ética que prioriza la protección de la biodiversidad y el cumplimiento de la ley.
“No podemos permitir actos que contradigan la misión de la Secretaría y pongan en riesgo los esfuerzos de conservación en Oaxaca”, apuntó la funcionaria estatal.
Santuario de tortugas en Oaxaca
Oaxaca alberga Playa de Escobilla, el santuario tortuguero más grande del mundo. Cada año, miles de tortugas golfinas llegan a desovar en sus 10 kilómetros de playa. Sin embargo, pese a los esfuerzos de protección y turismo sostenible, el saqueo de nidos y el tráfico de huevos para consumo humano siguen siendo graves problemas ambientales.
Conservación en riesgo
Organizaciones ambientales y autoridades locales llevan años trabajando para frenar el tráfico y consumo de huevos de tortuga, mediante campañas de concientización y operativos de vigilancia. Sin embargo, el caso de un funcionario ambientalista involucrado en el consumo ilegal generó especial indignación y llamados a reforzar las acciones educativas y punitivas.
Ambientalistas consultados por medios locales enfatizaron que el éxito de la conservación depende también de la coherencia y ejemplo de las autoridades. En ese sentido, la remoción de Agustín Elías Ramírez está causando controversia al tratarse de funcionario de la Secretaría de Medio Ambiente.
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