Un escándalo de seguridad nacional sacudió a la Ciudad de México. Zhi Dong Zhang, ciudadano chino identificado como un operador financiero crucial para los cárteles de Sinaloa y CJNG, se fugó de un arresto domiciliario en Lomas de Santa Fe, mientras era custodiado por la Guardia Nacional.
En un hecho que parece sacado de un guion de cine y que pone en tela de juicio la capacidad de las fuerzas de seguridad de élite de México, un criminal de alto perfil logró lo impensable: escapar de su arresto domiciliario a pesar de estar bajo la vigilancia directa de la Guardia Nacional. Horas después, en un operativo de emergencia, fue recapturado, pero el daño a la credibilidad institucional ya estaba hecho.
El protagonista de esta historia es Zhi Dong Zhang, un ciudadano de origen chino señalado por autoridades mexicanas y estadounidenses como una pieza clave en la maquinaria financiera y logística de los dos cárteles más poderosos del país.
Sugerencia: Una ficha de búsqueda o una foto de archivo de Zhi Dong Zhang, si está disponible, o una imagen de un complejo residencial de lujo en Santa Fe, CDMX.
¿Quién es Zhi Dong Zhang? El Enlace Chino de los Cárteles
Zhi Dong Zhang no es un delincuente común. Detenido en octubre de 2024 en un operativo con fines de extradición a Estados Unidos, está acusado de ser uno de los principales enlaces internacionales para el tráfico de cocaína, fentanilo y metanfetaminas.
Según las investigaciones de la Fiscalía General de la República (FGR), sus operaciones se extendían por Estados Unidos, Centro y Sudamérica, Europa y Asia, generando ganancias estimadas en más de 150 millones de dólares anuales. Su rol era fundamental para la compra de precursores químicos en Asia y el lavado de dinero a escala global.
La Fuga: ¿Corrupción o Incompetencia en la Guardia Nacional?
El detalle más escandaloso de la fuga es el contexto en el que ocurrió. Tras su detención, Zhi Dong Zhang fue internado en el Reclusorio Sur. Sin embargo, un juez federal le concedió el cambio de medida cautelar, pasando de la prisión preventiva a un arresto domiciliario.
Fue trasladado a una residencia en la exclusiva y supuestamente segura zona de Lomas de Santa Fe, en la alcaldía Álvaro Obregón (algunos reportes iniciales mencionaron Lomas de Padierna, Tlalpan). Y la custodia, la responsabilidad de que no escapara, recayó directamente en elementos de la Guardia Nacional.
«Se escapó mientras cumplía prisión domiciliaria en la Ciudad de México. Bajo la custodia, esto es importante, bajo la custodia de la Guardia Nacional, mientras esperaba su extradición a los Estados Unidos.» – Reporte de noticias.
La fuga desató una crisis inmediata y una pregunta inevitable que resuena en los pasillos del poder: ¿fue un acto de corrupción bien orquestado o una muestra de incompetencia alarmante por parte de la corporación de seguridad insignia del gobierno federal?
Recaptura y Preguntas Sin Respuesta
Apenas unas horas después de que se diera a conocer la noticia de la fuga, las autoridades federales lograron recapturar a Zhi Dong Zhang. Si bien la rápida acción evitó una vergüenza mayor, no borra las serias dudas que ha generado el incidente.
La FGR ya ha abierto una carpeta de investigación sobre la propia fuga para deslindar responsabilidades. La facilidad con la que un objetivo de tan alto valor, pendiente de extradición a Estados Unidos, pudo evadir la vigilancia de la Guardia Nacional, ha dejado una mancha difícil de limpiar y alimenta la narrativa de que la corrupción y la impunidad pueden permear incluso a las más altas esferas de la seguridad en México.
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