Desde hace más de dos décadas, Jorge Aragón y Ricardo Argaez han cruzado el Golfo de México trasladando embarcaciones desde Estados Unidos hacia el Caribe mexicano. Su experiencia con barcos de gran tamaño los ha convertido en referentes del sector náutico de Isla Mujeres. Cada vez que se requería una travesía complicada, para traer barcos desde el extranjero hacia el destino turístico, eran ellos quienes se hacían cargo.
El pasado miércoles 20 de agosto recibieron un nuevo encargo en Cayo Hueso, al sur de Florida. La misión era llevar a Isla Mujeres una lancha Regal de apenas 10 metros de largo equipada con dos motores Yamaha de 300 caballos de fuerza. No era la más grande ni la más poderosa de las embarcaciones que habían conducido, pero sí una de las más pequeñas en toda su trayectoria como marineros.
El trayecto, de 664 kilómetros sobre aguas abiertas del Golfo, equivalía a recorrer en carretera la distancia de Cancún hasta Villahermosa o Tuxtla Gutiérrez. Zarparon esemiércoles a la una de la tarde con la expectativa de llegar en un lapso de 12 a 14 horas. La madrugada del jueves 21 debían estar entrando a las costas de Isla Mujeres, como tantas veces antes lo habían hecho. Pero la señal se perdió en algún punto de la noche y, desde entonces, no se supo más de ellos.
La incertidumbre se convierte en búsqueda
Amelia Díaz, esposa de Jorge Aragón, fue la primera en notar el silencio. Al inicio se atribuyó a las condiciones del mar o a la falta de señal en el Golfo. En otras ocasiones su esposo había llegado con demoras de varias horas, incluso de días, y nada fuera de lo común parecía alterar el curso de la travesía.
Pero el viernes, el rumor de la desaparición comenzó a tomar fuerza entre los mismos compañeros marinos quienes intentaron rastrear la geolocalización de la nave, pero la embarcación “Chuleta” no aparecía en los radares, la incertidumbre se convirtió en preocupación real.
Compañeros, amigos y familiares organizaron de inmediato un plan de búsqueda. Amelia acudió a la Fiscalía General del Estado para activar la ficha oficial. En la descripción quedaron asentadas las señas de Jorge: 1.65 metros de altura, 80 kilos de peso, cabello negro, un tatuaje de ancla en el brazo izquierdo y otro de timón en la espalda, símbolos de la vida entera que ha dedicado al mar.
Ese mismo sábado, una avioneta privada despegó desde Isla Mujeres a las nueve de la mañana. Sobrevoló lo que alcanzaba el combustible, bordeando la zona baja del canal de Yucatán y la parte norte de la isla, siguiendo la posible ruta que pudieron haber trazado los capitanes. No hubo rastro ni de la tripulación ni de la lancha.
Con el paso de las horas la búsqueda se intensificó. Avionetas más grandes comenzaron a sobrevolar un radio más amplio, mientras embarcaciones de la Secretaría de Marina salían a rastrear desde el agua. También se notificó a las autoridades de Estados Unidos para que participaran en la localización. Hasta este domingo, ni los capitanes ni la “Chuleta” han sido encontrados, y el mar sigue guardando silencio sobre su destino.
Viento y lluvias: el impacto del clima
Durante la noche del miércoles y la madrugada del jueves, las condiciones en el Golfo de México estuvieron influenciadas por los rezagos del huracán Erin. Según el meteorólogo Franklin Arceo, aunque el ciclón no impactó directamente el sur de Florida, sus bandas nubosas provocaron cambios de presión en la zona costera, generando vaguadas que se extendieron a los alrededores.
“La cercanía de un huracán no solo trae bandas nubosas directas, también altera el entorno atmosférico creando o reforzando vaguadas, lo que provoca lluvias adicionales incluso lejos del centro del ciclón”, dijo.
Detalló que, de acuerdo con los registros del miércoles 20 de agosto, el día de la desaparición, en la región del Golfo se registraron ráfagas de viento de hasta 13 kilómetros por hora, mientras que las precipitaciones fueron ligeras en las zonas más cercanas a la costa.
“Ese día, las autoridades mexicanas emitieron alertas debido al incremento repentino del viento y del oleaje en nuestras costas, recomendando a los marineros extremar precauciones y seguir las indicaciones de la Autoridad Marítima Nacional y de Protección Civil durante sus rutas de navegación”, comentó.
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