Los recientes asesinatos de Fernandito y Dulce han sacudido al Estado de México y al país entero. Ambos casos, ocurridos en Los Reyes ‘La Paz’ y Chalco, han encendido las alarmas por la violencia que golpea a niñas y niños en la entidad.
Las investigaciones preliminares apuntan a que los crímenes podrían estar vinculados a conflictos por deudas económicas en la zona oriente del Edomex, lo que añade un matiz de brutalidad e impotencia a la tragedia.
El caso de Fernandito: un secuestro que terminó en tragedia
Fernandito “N”, de apenas cinco años, fue sustraído de su hogar como represalia por una deuda de mil pesos. Tras la denuncia presentada el 4 de agosto, las autoridades hallaron su cuerpo en una vivienda relacionada con las agresoras.
El informe forense reveló que murió por traumatismo craneoencefálico severo entre el 31 de julio y el 2 de agosto, marcando uno de los episodios más dolorosos en la memoria reciente del municipio.
El crimen de Dulce: violencia en su propio hogar
Dulce “N”, de 12 años, fue asesinada el 11 de agosto en Chalco. Según los primeros reportes, fue atacada directamente en la vivienda que compartía con sus abuelos. Al igual que en el caso de Fernandito, el móvil estaría relacionado con una deuda económica.
Delfina Gómez: “No podemos olvidar”
Durante la inauguración del Centro Libre para las Mujeres en Chalco, la gobernadora Delfina Gómez Álvarez rompió en llanto al recordar a las víctimas. Reconoció que su gobierno no logró prevenir las tragedias y ofreció disculpas públicas.
“No podemos dejar de hablar de lo que duele, la pérdida de dos niños… aún nos falta mucho por hacer para regresar la tranquilidad a los mexiquenses”.
La mandataria llamó a la ciudadanía a mantener viva la memoria de Fernandito y Dulce, y advirtió que su administración reforzará la seguridad con acciones directas en territorio.
Compromiso y llamado a la reflexión social
Gómez Álvarez subrayó que la violencia contra menores es un espejo doloroso de las fallas institucionales y comunitarias.
Pidió a la sociedad no normalizar ni silenciar estos hechos:
“Ambos casos deben ser para nosotros motivo de vergüenza y dolor. El dejar de hablarlo es una falta de respeto hacia lo que pasó”.
Finalmente, aseguró que su gobierno intensificará el trabajo cercano a las comunidades para prevenir la violencia, priorizando la protección de niñas, niños y mujeres.
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