La Casa Blanca fue escenario de un encuentro clave entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el primer ministro canadiense, Mark Carney, enfocado en flexibilizar los aranceles impuestos a Canadá y mejorar las relaciones comerciales bilaterales.
Trump afirmó que se han logrado “grandes avances” en las negociaciones, aunque todavía no se concreta un acuerdo definitivo. Según el mandatario, el conflicto comercial es un proceso normal y parte de la dinámica de negociaciones internacionales que buscan proteger los intereses de ambas naciones.
El contexto económico detrás de la visita
La guerra comercial emprendida por la administración Trump ha afectado significativamente a la economía canadiense, cuyo PIB cayó cerca del 1.5% en el segundo trimestre del año. Los aranceles a productos no cubiertos por el T-MEC complican las exportaciones y tensionan la relación con su principal socio comercial, Estados Unidos.
Carney, exgobernador del Banco de Inglaterra y nuevo primer ministro canadiense, llegó a Washington con la misión de restaurar la confianza bilateral y buscar acuerdos que permitan reducir el impacto económico de las medidas arancelarias.
Un diálogo económico con toque diplomático
Durante la reunión, Carney sorprendió con un gesto humorístico al decir: “Usé rojo para usted”, en referencia a su corbata al saludar a Trump en el Salón Oval. Sin embargo, detrás del humor, la visita tuvo un trasfondo serio: acordar prioridades comunes en comercio y seguridad entre ambas naciones.
Los expertos coinciden en que estas negociaciones reflejan la complejidad del comercio internacional en la era Trump, donde los aranceles y la política proteccionista se combinan con la diplomacia económica para mantener relaciones estables en América del Norte.
Impacto en México y el T-MEC
Aunque la reunión se centró en Canadá y EE.UU., las decisiones comerciales también afectan a México por el T-MEC, tratado que vincula a los tres países. La necesidad de mantener un equilibrio económico y de seguridad regional hace que este tipo de diálogos sean esenciales para minimizar riesgos y asegurar estabilidad en el comercio.
Perspectivas a futuro
Trump insistió en que los avances son significativos, pero advirtió que aún falta cerrar detalles clave sobre aranceles y políticas comerciales. La cooperación con Carney podría marcar un punto de inflexión en la guerra comercial, favoreciendo a los mercados y generando señales positivas para los inversores.
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