Dinastía Aguilar causa polémica por millonario concierto en Guadalajara
Guadalajara vivió una noche tricolor llena de música ranchera el pasado 15 de septiembre, cuando Ángela Aguilar, su padre Pepe Aguilar y su hermano Leonardo Aguilar encabezaron el espectáculo del Grito de Independencia. Pero detrás de los aplausos y las luces del escenario, el evento arrastró una controversia que aún resuena: el costo millonario que pagó el Gobierno de Jalisco a los artistas y la presión ciudadana para cancelarlo.
Una fiesta patria marcada por la controversia
Desde el momento en que se anunció que la Dinastía Aguilar sería la protagonista del evento oficial en la explanada del Centro Histórico de Guadalajara, miles de ciudadanos reaccionaron con molestia. A través de una petición en change.org, más de 200 mil personas pidieron al gobernador Pablo Lemus cancelar la presentación.
Los argumentos eran claros: consideraban que la familia Aguilar no representa valores positivos para las juventudes mexicanas ni para la comunidad migrante. La relación de Ángela Aguilar con Christian Nodal, señalada por muchos como un acto de traición hacia Cazzu, madre de la hija de Nodal, avivó la controversia. Además, declaraciones pasadas tanto de Pepe como de Ángela sobre temas migratorios generaron aún más indignación.
El costo millonario del evento
Pese a las críticas, el evento se llevó a cabo. Y fue hasta después que se revelaron las cifras oficiales del contrato firmado el 8 de agosto de 2025, entre la Agencia Estatal de Entretenimiento de Jalisco y los Aguilar.
El total desembolsado por el Gobierno de Jalisco ascendió a $31,639,520 pesos, divididos en dos rubros:
- $15,660,000 pesos como pago directo a Pepe, Ángela y Leonardo Aguilar por concepto de presentación artística.
- $15,979,520 pesos para la producción, montaje, logística y operación técnica del espectáculo.
Estos datos fueron divulgados por Univisión Famosos, con base en documentos firmados por el titular de la Unidad de Transparencia, Jorge Fernando Villegas Mendoza.
“Tradiciones no se cancelan”: la respuesta de Pepe Aguilar
Consciente de la presión pública, Pepe Aguilar publicó un mensaje previo al concierto defendiendo su participación y la importancia de las fiestas patrias. Su respuesta fue tajante:
“Porque las tradiciones no se cancelan, la raíz no se discute y el amor por lo que nos une, no se vota. A veces, con tanto ruido alrededor, lo único que queda es cantar más fuerte”.
Y eso hizo. Ante más de 80,000 asistentes en la Plaza de la Liberación, la familia Aguilar ofreció un espectáculo de más de dos horas con mariachi, jinetes, fuegos artificiales y un repertorio clásico de música vernácula.
Tras el evento, Pepe agradeció con un mensaje igual de simbólico:
“80,000 gargantas, una sola verdad. Gracias Guadalajara. ¡Viva México!”.
¿Por qué tanta crítica a los Aguilar?
Los motivos detrás del rechazo público no se limitan a temas musicales. La familia Aguilar ha estado envuelta en distintos escándalos:
- Ángela Aguilar fue duramente criticada por una declaración donde se identificó como “mexicoamericana legal”, frase que fue vista como un desdén hacia migrantes sin documentos en Estados Unidos.
- Pepe Aguilar, en entrevistas anteriores, expresó opiniones sobre la migración que fueron consideradas “insensibles” por activistas.
- El hijo mayor de Pepe, Emiliano Aguilar, ha estado envuelto en controversias judiciales, sumando más ruido a la imagen pública de la familia.
Además, hay una percepción extendida de que la Dinastía Aguilar ha adoptado un discurso elitista y desconectado de la realidad popular, lo cual contrasta con el perfil tradicionalmente humilde que se asocia con la música ranchera.
¿Fue un uso indebido de recursos públicos?
Este es uno de los puntos más delicados. Para muchos ciudadanos, el hecho de que $31 millones de pesos del erario se destinaran a artistas polémicos resulta inaceptable, sobre todo en un contexto donde Jalisco enfrenta problemas graves de seguridad, educación y salud pública.
La crítica no se enfoca solo en la familia Aguilar, sino también en las prioridades del gobierno estatal. ¿Era necesario gastar esa suma para un evento de una noche? ¿No había artistas locales o propuestas culturales más representativas o menos divisivas?
El respaldo de la audiencia
A pesar de todo, la realidad es que más de 80 mil personas asistieron al concierto, lo que confirma que la familia Aguilar sigue teniendo una base sólida de seguidores. Las redes sociales se llenaron de videos, fotos y elogios por la calidad del espectáculo, la producción y la entrega en el escenario.
Para algunos, la música fue más fuerte que la polémica.
¿Arte o controversia?
Lo sucedido en Guadalajara es el reflejo de una conversación mucho más profunda: ¿dónde se traza la línea entre arte y reputación pública? ¿Merecen artistas envueltos en escándalos el respaldo económico del Estado si aún logran convocar multitudes?
El concierto de los Aguilar dejó claro que el legado cultural de una familia puede coexistir con las controversias. Pero también recordó que la ciudadanía está cada vez más atenta a cómo se usan los recursos públicos y qué tipo de figuras se promueven desde los gobiernos.
La Dinastía Aguilar, con su talento indiscutible y su historia musical, sigue dividiendo opiniones. Pero si algo quedó claro aquella noche en Guadalajara, es que mientras haya escenario, ellos seguirán cantando… y generando debate.


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