EU inicia consultas públicas rumbo a la revisión del T-MEC en 2026
En Washington, el gobierno de Estados Unidos encendió la primera chispa de un proceso que definirá el rumbo económico de América del Norte. Este miércoles, la Representación Comercial de Estados Unidos (USTR) abre las consultas públicas para revisar el Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), cuyo encuentro oficial de evaluación se celebrará el 1 de julio de 2026. El anuncio llega en medio de crecientes tensiones comerciales derivadas de la política arancelaria de Donald Trump, lo que convierte a esta revisión en un capítulo decisivo para el futuro del tratado.
El inicio de un proceso clave para la región
De acuerdo con el borrador que se publicará en el Registro Federal, la revisión conjunta del T-MEC busca evaluar su operación, medir su efectividad y escuchar a los sectores que dependen de él. El USTR convoca a empresas, cámaras de comercio, pequeños negocios y ciudadanos a enviar comentarios sobre acceso a mercados, clima de inversión, seguridad económica y cooperación trilateral. El objetivo: recopilar aportaciones que guiarán la posición de Estados Unidos antes de la negociación formal.
Calendario de consultas y audiencias
La primera fase establece un plazo de 45 días para enviar comentarios tras la publicación del aviso. La audiencia pública se realizará el 17 de noviembre en la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos, y siete días después vencerá el plazo para comentarios de réplica. Cada voz contará en este proceso, desde grandes corporaciones hasta pequeños negocios, que podrán exponer sus preocupaciones y propuestas a través del portal oficial del USTR.
El contexto de tensiones comerciales
El telón de fondo no es sencillo. Desde su regreso a la presidencia, Donald Trump ha impulsado medidas arancelarias que han generado fricciones tanto con México como con Canadá. Su visión de renegociar continuamente los términos comerciales añade incertidumbre al proceso de revisión del T-MEC. Para analistas, esta consulta pública no es solo un ejercicio democrático, sino también un terreno donde se juega la narrativa política de Estados Unidos en relación con sus socios más cercanos.
El reto de mantener la integración económica
Más allá de las tensiones, el T-MEC representa uno de los pilares más importantes de la integración económica de América del Norte. Según el USTR, la revisión debe garantizar que el tratado siga impulsando la competitividad regional, el liderazgo tecnológico y la producción conjunta frente a los desafíos de otras potencias globales. La revisión del 2026 también será la primera gran oportunidad para decidir si el acuerdo se extenderá automáticamente por otros 16 años, lo que marcaría la pauta para varias generaciones de empresarios y trabajadores.
Una oportunidad para redefinir el rumbo
Las consultas no solo recogen datos: son un espacio para contar historias. Detrás de cada comentario habrá agricultores que dependen de exportar a Estados Unidos, empresarios que buscan reglas claras para invertir en México o innovadores canadienses que apuestan por la cooperación tecnológica. El T-MEC no se mide solo en cifras, sino en las vidas cotidianas que dependen de su estabilidad y proyección.
América del Norte frente al mundo
La revisión del T-MEC se convierte en un espejo del papel que la región quiere jugar en el tablero global. Mientras Asia impulsa nuevos bloques comerciales y Europa consolida su mercado único, América del Norte enfrenta la disyuntiva de fortalecer su integración o fracturarse bajo la presión de intereses nacionales. El proceso que inició este miércoles será la primera página de esa historia.


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