Aranceles a productos asiáticos generan alarma en México
La Cámara de Comercio y Tecnología México-China emitió un comunicado este jueves expresando su profunda preocupación ante los aranceles anunciados por el Gobierno de México, que van del 10 al 50 por ciento sobre más de mil 400 fracciones arancelarias de productos originarios de Asia. La organización advirtió que estos gravámenes podrían tener un efecto negativo significativo en sectores industriales clave y comprometer la competitividad del país.
Impacto en la industria automotriz y cadenas de suministro
El sector automotriz es uno de los más afectados. Los aranceles del 50% sobre automóviles importados encarecerán los precios de inmediato para los consumidores y podrían frenar la transición hacia la movilidad eléctrica. La Cámara recordó que en los últimos 35 años, la industria automotriz ha invertido más de 400 mil millones de dólares en México, consolidando al país como un hub global. Las cadenas de suministro dependen de componentes provenientes de distintas regiones del mundo, incluyendo China.
Reacciones del sector y riesgos para la inversión
La Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) señaló que el incremento podría poner en riesgo una inversión de 60 mil millones de pesos destinada a abrir 800 puntos de venta de autos importados desde China, afectando 32 mil empleos directos y más de 200 mil consumidores. La Electro Movilidad Asociación (EMA) advirtió que los aranceles encarecerían más de 100 modelos de vehículos eléctricos y 50 híbridos enchufables, frenando la expansión de la electromovilidad en México.
Otros sectores afectados
Además de la industria automotriz, los aranceles impactarán directamente a la siderúrgica, textil, calzado, plásticos, muebles y electrodomésticos. La Cámara destacó que para bienes de consumo como textiles, calzado, papel y electrodomésticos, el incremento de impuestos podría derivar en un impacto inflacionario sin precedentes, afectando el poder adquisitivo de los hogares mexicanos.
Propuesta de diálogo y solución gradual
ChinaCham reiteró su disposición a dialogar con el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, proponiendo un enfoque gradual y equitativo que atienda los objetivos fiscales sin afectar desproporcionadamente a consumidores y sectores productivos. La organización subrayó que el fortalecimiento de la relación bilateral requiere consensos, apertura y medidas que fomenten la innovación, la inversión y el desarrollo compartido.
Consecuencias a mediano y largo plazo
Los aranceles podrían afectar la competitividad de México en mercados internacionales, frenando la inversión extranjera y limitando la participación de industrias estratégicas en cadenas de manufactura global. Compañías como General Motors, Ford, Kia y Chrysler dependen de la fabricación de componentes en China para mantener precios competitivos en el país, y las medidas actuales podrían alterar gravemente esa dinámica.
Hacia una política comercial más equilibrada
El llamado de la Cámara México-China pone de relieve la importancia de un enfoque equilibrado que permita al país cumplir con sus objetivos fiscales, al mismo tiempo que protege el empleo, la inversión y el desarrollo tecnológico. El diálogo entre el sector privado y el gobierno será clave para evitar consecuencias negativas de largo alcance en la economía mexicana y asegurar la estabilidad de mercados estratégicos.
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