México: la inversión empresarial toca fondo en junio de 2025
La caída en la inversión de las empresas mexicanas ha encendido las alarmas del sector industrial. De acuerdo con el reporte de Expectativas Económicas de la Manufactura publicado por Caintra Nuevo León, solo el 16% de las empresas realizó inversiones en maquinaria, equipo o construcción durante junio de 2025, el nivel más bajo registrado desde agosto de 2020, en plena pandemia.
La historia detrás del desplome: un clima adverso
En un contexto postpandémico que parecía ofrecer señales de recuperación, la realidad para la industria manufacturera del norte del país ha sido muy distinta. Los empresarios enfrentan un entorno cada vez más complejo. El panorama político nacional, que suma siete meses consecutivos como el principal obstáculo, ha generado incertidumbre, paralizando decisiones clave de inversión.
Además, se suma una actividad económica debilitada, que junto con el contexto político acumula el 72.8% de las respuestas sobre factores que obstaculizan el crecimiento empresarial. Este escenario ha obligado a muchos empresarios a poner el freno de mano y postergar proyectos de expansión o modernización.
Comparativa anual: una caída preocupante
En junio de 2024, el 26% de los empresarios aún mostraba disposición para invertir. Hoy, esa cifra se ha desplomado diez puntos porcentuales. Los mejores meses del último año fueron julio y septiembre, donde se alcanzó un 36% de inversión, una cifra que hoy parece lejana.
El Inegi confirma esta tendencia: al cierre de abril de 2025, la inversión fija bruta cayó un 7.7% interanual, acumulando ocho meses consecutivos de retrocesos.
Factores que frenan la inversión empresarial
La industria no solo acusa al clima político y económico. Existen otros obstáculos que están impidiendo que las empresas desplieguen su potencial:
- Entorno internacional adverso (33.9%)
- Menor demanda externa (33.1%)
- Incremento en el precio de materias primas (23%)
- Inseguridad (22.3%)
- Escasez de personal capacitado (21.5%)
Esta combinación de factores ha configurado un escenario complejo, donde cada decisión empresarial se toma con extrema cautela.
Indicadores en rojo: señales que preocupan
Los datos de Caintra también revelan deterioros en los principales indicadores de manufactura:
- Nuevos pedidos: cayó a 40.69 puntos, el nivel más bajo desde julio de 2020.
- Volumen físico de producción: se redujo en 3.46 puntos, para ubicarse en 41.83.
- Capacidad utilizada: bajó 3.12 puntos, quedando en 44.35 unidades.
Mientras tanto, los únicos indicadores que mostraron avances fueron los relacionados con el comercio exterior y el número de trabajadores, aunque de manera insuficiente para compensar el retroceso general.
Análisis final: ¿es reversible este estancamiento?
Aunque la tendencia muestra una desaceleración profunda, aún existe margen para la recuperación si el entorno político y económico ofrece estabilidad. La clave estará en reconstruir la confianza del sector privado, impulsar medidas que estimulen la inversión productiva y facilitar el acceso a recursos humanos capacitados.
La historia reciente muestra que, aunque la industria mexicana ha atravesado crisis similares, siempre ha encontrado una vía para reinventarse. Sin embargo, en 2025, esa resiliencia será puesta a prueba como nunca antes.
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