Desigualdad extrema en México según ENIGH 2024
El más reciente análisis de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2024, realizado por Oxfam México y el Instituto de Estudios sobre la Desigualdad (Indesig), reveló cifras alarmantes sobre la brecha económica en México.
Según el estudio, el 1% de los hogares más ricos gana 442 veces más que el 10% más pobre. Esta diferencia extrema demuestra que, aunque los ingresos promedio han aumentado, la distribución sigue concentrada en una minoría privilegiada.
Comparativa de ingresos y consumo
Los datos muestran que los hogares más pobres perciben 2,168 pesos mensuales por persona, mientras que el 1% más rico obtiene 958,777 pesos. Además:
- El 10% más pobre recibe solo 2% de los ingresos totales del país.
- El 1% más rico concentra 35% de los ingresos nacionales.
- Los hogares ricos destinan su dinero a lujos, educación, entretenimiento y transporte privado, mientras los pobres gastan en alimentos, vivienda y transporte público.
Esta brecha refleja una desigualdad estructural persistente, donde el acceso a derechos fundamentales como salud, educación y vivienda depende directamente del nivel económico.
Incrementos recientes no reducen la brecha
Entre 2018 y 2024, los ingresos promedio de los hogares mexicanos crecieron 18.7%, pasando de 18,381 a 21,825 pesos. El salario mínimo también aumentó hasta 1,016 pesos, lo que significó un incremento de 54% en hogares pobres.
A pesar de esto, la desigualdad económica sigue siendo alarmante, y las familias con bajos ingresos deben gastar gran parte de sus recursos en necesidades básicas, limitando su movilidad social y capacidad de desarrollo personal.
Impacto en derechos humanos y calidad de vida
Según Máximo Jaramillo, director de Indesig, la desigualdad condiciona el acceso a derechos básicos:
- Solo los más ricos pueden acceder plenamente a salud, educación, vivienda digna y servicios de cuidado.
- Para los hogares con bajos ingresos, ejercer estos derechos implica gastos de bolsillo que afectan su bienestar y limitan sus proyectos de vida.
Esta situación evidencia la necesidad de políticas públicas más efectivas que reduzcan la brecha y garanticen igualdad de oportunidades para toda la población.
Retos y posibles soluciones
Para combatir la desigualdad extrema en México, expertos sugieren:
- Implementar políticas de redistribución de ingresos efectivas.
- Mejorar la cobertura y calidad de servicios públicos.
- Aumentar el acceso a educación y salud gratuita para hogares de bajos ingresos.
- Promover programas de inclusión financiera que faciliten la movilidad social.
- Incentivar la creación de empleo digno y salarios que superen el umbral de pobreza.
Solo con un enfoque integral se podrá lograr una reducción real de la brecha económica y un acceso equitativo a oportunidades de vida digna.


TE PODRÍA INTERESAR