El rugido de los Tigres no fue suficiente para frenar a unos Marineros que parecen decididos a escribir su nombre en la historia. En una noche de poder y precisión, Seattle venció 8-4 a Detroit y tomó ventaja de 2-1 en la Serie Divisional de la Liga Americana, colocándose a solo una victoria de su primera Serie de Campeonato desde 2001.
Una noche de poder en Detroit
Cal Raleigh fue el protagonista de la jornada con un jonrón de dos carreras que selló el destino del juego. Eugenio Suárez y JP Crawford también conectaron cuadrangulares solitarios, demostrando que el lineup de Seattle está en su mejor momento cuando más se necesita. Cada batazo resonó como un eco de esperanza para una afición que lleva más de dos décadas soñando con volver a la cima.
Logan Gilbert, el brazo que sostuvo la ventaja
Logan Gilbert brilló desde la lomita, permitiendo solo una carrera y cuatro hits en seis entradas impecables. Con siete ponches y sin bases por bolas, el abridor de Seattle ofreció una actuación de autoridad que mantuvo bajo control a una ofensiva de Detroit que nunca logró despertar. Su temple fue el cimiento de una victoria que acerca a los Marineros a la gloria.
La ofensiva de Seattle impuso el ritmo
Seattle golpeó primero y golpeó fuerte. En la tercera entrada, Víctor Robles abrió con un doble y, tras un error del jardinero Riley Greene, anotó la primera carrera del juego. Randy Arozarena continuó con un sencillo productor que puso el marcador 2-0.
En la cuarta, Suárez envió un lanzamiento a las gradas del jardín izquierdo con un jonrón de 422 pies. Raleigh, con un imparable oportuno en esa misma entrada, amplió la ventaja a 4-0. Cada carrera acercaba más a los Marineros al sueño que los ha eludido por años.
Los Tigres lucharon hasta el final
Detroit, con su público intentando impulsar una remontada, encontró algo de vida en la novena entrada. Spencer Torkelson conectó un doble de dos carreras y Andy Ibáñez lo siguió con un sencillo productor. Sin embargo, el cerrador All-Star Andrés Muñoz entró en escena para apagar cualquier esperanza con un elevado y un doble play que selló el triunfo.
Una serie que puede marcar un antes y un después
Los Marineros tendrán su primera oportunidad de avanzar este miércoles por la tarde en el Juego 4 en Comerica Park. Si no lo logran, una nueva oportunidad los espera en Seattle para un posible Juego 5. Pero esta vez, el aire en el dugout se siente diferente: hay confianza, hay hambre y hay una conexión entre jugadores que huele a destino.
Desde 2001, los aficionados han esperado este momento. Hoy, con Raleigh, Suárez, Crawford y Gilbert liderando el camino, Seattle parece más cerca que nunca de romper el ciclo y regresar a la Serie de Campeonato.


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