La parasomnia es un trastorno del sueño que afecta tanto a niños como a adultos, aunque los episodios son mucho más comunes en los primeros. Se trata de una condición que involucra comportamientos anormales durante el sueño, como caminar mientras se duerme (sonambulismo), hablar, comer o incluso realizar acciones complejas, todo mientras el individuo permanece parcialmente dormido. Los episodios pueden ser desconcertantes, tanto para quienes los sufren como para aquellos que están cerca.
Si bien la ciencia del sueño ha avanzado significativamente en los últimos años, aún quedan muchas incógnitas sobre qué ocurre exactamente en el cerebro durante un episodio de parasomnia. Los estudios más recientes han comenzado a arrojar luz sobre estos misteriosos eventos, desafiando la antigua creencia de que los sueños solo ocurren durante la fase de sueño REM (movimiento ocular rápido).
La fascinante investigación de las parasomnias
Un reciente estudio publicado en la revista Nature Communications ha abierto un nuevo capítulo en la comprensión de las parasomnias, un comportamiento anormal del sueño. Los científicos han utilizado una tecnología avanzada de electroencefalografía (EEG) para registrar la actividad cerebral de personas que experimentan episodios de parasomnia, durante su sueño no REM. Este enfoque ha permitido obtener datos más precisos sobre cómo el cerebro maneja estas extrañas experiencias mientras el cuerpo se encuentra en reposo.
Los resultados han sido sorprendentes. En el 56% de los episodios, los pacientes reportaron haber estado soñando mientras realizaban actividades sonámbulas. Los contenidos de esos sueños variaban, pero en muchos casos, las personas soñaban que estaban en peligro, como si estuvieran a punto de sufrir un accidente o una catástrofe. Algunos pacientes mencionaron que creían que su casa se iba a derrumbar, mientras que otros tuvieron sueños extremadamente vívidos en los que interactuaban con objetos o personas de manera muy realista, pero sin saber que estaban dormidos.
El cerebro «atrapado» entre el sueño y la vigilia
Lo que hace única a esta investigación es la idea de que el cerebro de una persona con parasomnia está atrapado entre el sueño y la vigilia. A pesar de estar en la fase de sueño profundo no REM, algunas áreas del cerebro parecen estar parcialmente activas, lo que provoca conductas que parecen automáticas, pero están impulsadas por los sueños. Cuando se activa el cerebro en estos momentos, las personas pueden realizar tareas complejas como caminar, hablar o buscar objetos, sin ser conscientes de lo que están haciendo.
Este fenómeno se conoce como «actividad de sueño inconsciente», y es uno de los aspectos más desconcertantes de la parasomnia. A veces, las personas que sufren de estos episodios no recuerdan nada de lo que hicieron, y pueden despertarse con una sensación de confusión o desconcierto, sin comprender por qué están haciendo cosas fuera de lo común.
El estudio de los episodios de parasomnia en laboratorio
En los estudios recientes, los científicos han utilizado técnicas avanzadas para provocar episodios de parasomnia en un entorno controlado, como un laboratorio del sueño. Durante estos experimentos, los pacientes fueron despertados artificialmente por un sonido fuerte mientras se encontraban en la fase de sueño profundo. En algunos casos, este estímulo provocó un episodio de parasomnia, en el que los pacientes realizaron movimientos extraños o caminaron sin ser conscientes de su entorno.
El objetivo de estos estudios es comprender mejor cómo los distintos patrones de actividad cerebral afectan el comportamiento durante los episodios de parasomnia. Los resultados obtenidos hasta ahora han demostrado que las personas que experimentan sueños durante estos episodios muestran una activación cerebral similar a la que ocurre durante el sueño REM, lo que sugiere que los sueños pueden no estar limitados a una fase específica del sueño, sino que pueden ocurrir en varias etapas.
Impacto en el tratamiento de la parasomnia
Aunque los estudios sobre parasomnia aún están en sus primeras etapas, los avances son prometedores. Los científicos esperan que, al entender mejor qué ocurre en el cerebro de una persona durante un episodio de parasomnia, puedan desarrollar tratamientos más específicos y efectivos. Actualmente, muchas personas con parasomnias son tratadas con medicamentos generales para el sueño, pero estos tratamientos no siempre son efectivos y pueden tener efectos secundarios.
Si se pueden identificar los sistemas neuronales implicados en la parasomnia, podrían desarrollarse tratamientos más dirigidos que ayuden a prevenir estos episodios sin causar efectos negativos en la calidad del sueño. Los investigadores también están interesados en extender estos estudios a los episodios que ocurren durante el sueño REM, lo que podría abrir nuevas posibilidades para el tratamiento de trastornos más complejos del sueño.
La importancia de la investigación sobre el sonambulismo y las parasomnias
La investigación sobre las parasomnias y el sonambulismo tiene implicaciones significativas no solo para aquellos que sufren estos trastornos, sino también para la comprensión general de cómo funciona el cerebro durante el sueño. Este campo de estudio podría aportar información valiosa sobre la neurociencia del sueño y ayudar a desarrollar estrategias más efectivas para tratar los trastornos del sueño en general.
Además, las personas que experimentan parasomnias a menudo se sienten estigmatizadas o avergonzadas por sus episodios, ya que no comprenden lo que les sucede ni cómo pueden evitarlo. Los avances en la comprensión de estos trastornos ofrecen una oportunidad para aliviar ese malestar y proporcionar soluciones más eficaces y personalizadas.
¡Únete a nuestro canal de Telegram! Las noticias más relevantes del día directamente en tu dispositivo móvil.
TE PODRÍA INTERESAR