La detención que reaviva las sombras del caso Ayotzinapa
La noche del 12 de agosto, la calma aparente en Tepecoacuilco, Guerrero, se quebró. Afuera del hotel Vida de Lago, un establecimiento que hasta hace poco parecía un punto turístico más en la región, agentes federales interceptaron al empresario y ex candidato a la gubernatura por el PT y PVEM, Pedro Segura Valladares. La orden era clara: detenerlo por el delito de delincuencia organizada.
Lo que para algunos fue una captura sorpresiva, para otros representó el desenlace de años de sospechas. Según testigos protegidos, Segura no era solo un empresario; presuntamente estaba vinculado a la organización criminal Guerreros Unidos, la misma señalada en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en 2014.
Los testimonios que lo acusan
La acusación más grave proviene de “Carla”, un testigo protegido que asegura que el 27 de septiembre de 2014, Segura recibió en su hotel a cuatro jóvenes normalistas. Según su relato, estos estudiantes fueron llevados hasta el lugar por “Orlando”, jefe de plaza en Tepecoacuilco.
No es el único que lo señala. “Polo” y Ernesto Pineda, presunto integrante de Guerreros Unidos, afirman que el hotel Vida de Lago se convirtió en una bodega de droga, donde cada quince días llegaban entre media tonelada y tres toneladas de marihuana.
Un empresario con presuntos nexos de alto nivel
Los testigos también mencionan que Segura tenía reuniones frecuentes con José Luis Abarca, ex alcalde de Iguala, así como con Sidronio Casarrubias y Gildardo López Astudillo “El Gil”, ambos líderes criminales directamente implicados en el caso Ayotzinapa.
En una de esas reuniones, recuerda “Carla”, su labor fue brindar seguridad al encuentro. Al final, recibió de Segura un sobre con dinero como pago por sus servicios.
Del turismo al crimen organizado: la otra cara del hotel Vida de Lago
Ubicado en Tepecoacuilco, el hotel Vida de Lago era, en apariencia, un sitio para el descanso. Sin embargo, los testimonios lo describen como un punto clave en la logística de Guerreros Unidos. “Carla” relata que, desde 2013, el lugar recibía droga proveniente de diferentes municipios, como Huitzuco, Polotzingo y Mayanalán.
La investigación actual lo vincula únicamente con delincuencia organizada, pero el señalamiento de haber recibido a cuatro estudiantes desaparecidos mantiene abierta la posibilidad de que su expediente se amplíe a desaparición forzada.
Un caso que mantiene vivo el dolor y la exigencia de justicia
A casi once años de la desaparición de los 43 normalistas, cualquier pista o nuevo involucrado revive el dolor de las familias y la exigencia de justicia. La detención de Pedro Segura Valladares podría representar una pieza clave para reconstruir las horas posteriores a la tragedia de Iguala.
Pero también deja en evidencia la compleja red de política, crimen organizado y corrupción que ha marcado la historia reciente de Guerrero. El juicio que viene podría revelar información que hasta ahora ha permanecido oculta.
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