En un operativo de escala sin precedentes, autoridades de la Ciudad de México aseguraron casi 1,000 toneladas de autopartes presuntamente robadas en la alcaldía Cuauhtémoc, asestando un duro golpe a las redes que alimentan el robo de vehículos en la capital.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México han ejecutado uno de los decomisos más grandes en la historia reciente de la lucha contra el mercado negro de autopartes. Durante un cateo masivo en la alcaldía Cuauhtémoc, se aseguraron cerca de 1,000 toneladas de refacciones y piezas de vehículos de dudosa procedencia.
El operativo: Un golpe estratégico en el corazón del mercado negro
El cateo se llevó a cabo en la colonia Buenos Aires, un área de la alcaldía Cuauhtémoc históricamente conocida por ser un centro neurálgico para la venta y distribución de autopartes robadas. La operación, que involucró a cientos de elementos policiales y personal ministerial, se centró en varios inmuebles que funcionaban como bodegas y puntos de venta.
La magnitud del decomiso evidencia el tamaño y la sofisticación de las redes criminales dedicadas a este delito. Las casi mil toneladas de material incluyen desde motores y transmisiones hasta puertas, fascias y computadoras de vehículos de diversas marcas y modelos.
Desmantelan el motor del robo de vehículos
Este operativo no es solo una cifra impresionante; representa un ataque directo a la lógica económica que impulsa el robo de automóviles en toda la Zona Metropolitana del Valle de México. La existencia de un mercado tan vasto y accesible para piezas robadas crea una demanda constante que los delincuentes buscan satisfacer mediante el robo de vehículos, ya sea con violencia o cuando están estacionados.
Al desmantelar estos centros de acopio y venta, las autoridades buscan romper el ciclo de robo-desmantelamiento-venta que afecta a miles de ciudadanos cada año.
Las cifras: ¿Qué significan 1,000 toneladas?
Para poner en perspectiva la escala del decomiso, 1,000 toneladas equivalen al peso de aproximadamente 700 automóviles compactos. Esta cantidad de material podría llenar decenas de tráileres y representa un valor en el mercado negro que se estima en millones de pesos.
Hasta el momento, las autoridades no han proporcionado un desglose completo sobre el número de personas detenidas durante el operativo ni el valor exacto estimado de la mercancía incautada. Sin embargo, el impacto visual y logístico del aseguramiento ya lo posiciona como un hito en la estrategia de seguridad de la capital. La investigación continúa para identificar a los líderes de estas redes criminales y determinar el origen específico de las miles de piezas recuperadas.
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