En una reciente conferencia matutina desde Palacio Nacional, la presidenta Claudia Sheinbaum expresó su desacuerdo con la decisión del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, de catalogar a los cárteles mexicanos de la droga como grupos terroristas. Esta medida fue anunciada en el marco de una serie de acciones para combatir el tráfico de fentanilo y otros delitos relacionados, pero Sheinbaum dejó claro que, en su opinión, tal clasificación no ayuda a resolver la crisis de seguridad y salud pública, y puede obstaculizar la colaboración bilateral entre México, Canadá y Estados Unidos.
El trasfondo de la designación de los cárteles como grupos terroristas
El anuncio de Justin Trudeau de incluir a los cárteles mexicanos en la lista de grupos terroristas fue realizado en el contexto de una estrategia para combatir el fentanilo, una droga altamente letal que ha devastado a miles de familias en Estados Unidos y Canadá. Esta decisión viene después de una conversación entre Trudeau y Donald Trump, en la que también se discutió la situación de la frontera y la cooperación entre ambos países para frenar el tráfico de drogas.
Trudeau también reveló que Canadá designará un ‘Zar del fentanilo’ que se encargará de coordinar las acciones contra el tráfico de esta droga, además de reforzar la seguridad fronteriza con helicópteros, personal operativo y nuevas tecnologías. Como parte de su estrategia, el gobierno canadiense destinará mil 300 millones de dólares para aumentar la vigilancia y enviar a 10,000 agentes de seguridad a la zona fronteriza.
Sheinbaum: “No ayuda” la clasificación de los cárteles como terroristas
Claudia Sheinbaum, al ser cuestionada sobre el tema, manifestó que México no considera útil el catalogar a los cárteles como grupos terroristas. La presidenta subrayó que, aunque México reconoce el desafío del tráfico de fentanilo, esta estrategia complicaría las negociaciones y la colaboración directa que ambos países necesitan para enfrentar la inseguridad de manera efectiva.
Sheinbaum también destacó que la clasificación de los cárteles como terroristas no resolvería el problema del tráfico de armas de alto poder, que Estados Unidos sigue enviando a México y que es una de las principales causas de la violencia creciente en el país. “¿Qué va a pasar con las armadoras que arman a estos grupos?” preguntó retóricamente Sheinbaum, sugiriendo que el problema no es solo el tráfico de drogas, sino también el tráfico de armas que alimenta a los cárteles.
Compromisos entre México y Estados Unidos: cooperación ante la crisis
Además de las tensiones con Canadá, Claudia Sheinbaum también celebró los avances en la cooperación bilateral con Estados Unidos. En una conversación telefónica reciente, Donald Trump acordó suspender los aranceles a las importaciones de México por un mes, a cambio de compromisos en temas de seguridad. Este gesto es considerado como un triunfo para Sheinbaum, que logró una pausa en los aranceles que había sido previamente anunciada por Trump.
Como parte del acuerdo, México se compromete a desplegar a 10,000 elementos de la Guardia Nacional en la frontera norte para prevenir el tráfico de drogas y armas. En paralelo, Estados Unidos se compromete a trabajar para evitar el tráfico de armas de alto poder hacia México, un compromiso clave para frenar la violencia generada por los cárteles. Ambos países también discutirán estrategias conjuntas para combatir el tráfico de fentanilo.
Impacto en las relaciones bilaterales y desafíos para México
La postura de Sheinbaum refleja un enfoque más pragmático y centrado en la cooperación regional en lugar de la criminalización de los actores involucrados en el narcotráfico. La lucha contra el crimen organizado es un desafío común para México, Estados Unidos y Canadá, y Sheinbaum considera que la solución pasa por el trabajo conjunto en el marco de cooperación internacional y el respeto a la soberanía de los países.
Sin embargo, la clasificación de los cárteles como terroristas podría tener consecuencias negativas en las relaciones bilaterales, ya que podría reforzar las percepciones de hostilidad y dificultar la negociación de acuerdos de seguridad y comercio entre los países. La presidenta mexicana reitera que México tiene un papel activo en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, pero lo hace dentro del marco de su soberanía nacional.
La necesidad de cooperación más allá de las etiquetas
El posicionamiento de Sheinbaum sobre la catalogación de los cárteles como terroristas refleja la necesidad de colaboración efectiva en lugar de la adopción de medidas unilaterales. La lucha contra el narcotráfico y el fentanilo requiere de una estrategia compartida que involucre a todos los actores relevantes en la región, desde los gobiernos hasta las organizaciones internacionales. Solo a través de coordinación y un enfoque más integral se podrá frenar de manera efectiva el impacto de los cárteles en México, Estados Unidos y Canadá.
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