El 24 de octubre de 2024, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) aprobó un proyecto de presupuesto que marca un hito en su historia: una reducción significativa en los salarios de sus altos funcionarios, incluidos los 11 ministros. Este recorte es una de las principales medidas derivadas de la reciente reforma judicial, que busca disminuir las remuneraciones de los funcionarios judiciales a niveles inferiores a los del presidente de la República. En este artículo, analizaremos cómo estos cambios afectan a los ministros y funcionarios de la SCJN, los motivos detrás de esta decisión y qué implica para el presupuesto de la Corte en 2025.
El Recorte Salarial de los Ministros: Un 48% Menos en sus Ingresos
El proyecto de presupuesto de la SCJN para 2025 contempla una reducción del 48% en los salarios de los ministros. Esto significa que, en lugar de percibir los 5.5 millones de pesos anuales que recibían hasta 2024, los ministros ganarán 2.8 millones de pesos en 2025, según lo aprobado en la sesión privada del pleno. Esta reducción también afecta a otros funcionarios clave del tribunal, como titulares de órganos, secretarios de Acuerdo, directores generales y coordinadores de Ponencia. Esta disminución salarial responde a la reforma judicial que busca establecer una equidad en las remuneraciones de los servidores públicos del poder judicial, comparándolos con los altos cargos del poder ejecutivo.
El Impacto de la Reforma Judicial en el Presupuesto de la SCJN
Para el ejercicio fiscal de 2025, la SCJN ha solicitado un presupuesto de 5,922.9 millones de pesos, lo que representa una disminución de 1.4% en términos reales con respecto al presupuesto del año anterior, ajustado por la inflación. Este monto también es un 23.7% menor al presupuesto autorizado en 2018. Esta reducción se enmarca dentro de un ejercicio riguroso de austeridad fiscal, donde la Corte ha buscado ajustar sus operaciones y necesidades sin comprometer la impartición de justicia.
El Efecto en los Servicios Personales: La Prioridad del Factor Humano
A pesar de la reducción presupuestal, la SCJN ha decidido destinar el 80% del presupuesto solicitado a los servicios personales, es decir, a los salarios y remuneraciones de los trabajadores. Esto responde a la necesidad de garantizar la correcta operación de la justicia, ya que dos terceras partes de los 3,805 puestos disponibles en la Corte están relacionados con labores jurisdiccionales o de apoyo directo a la función jurisdiccional. Es un reconocimiento de que el factor humano es esencial para mantener la imparcialidad y efectividad en los procesos judiciales.
¿Por qué la SCJN Recibió un Recorte Presupuestal en 2024?
En 2024, la Cámara de Diputados realizó un recorte de 321.9 millones de pesos al presupuesto solicitado por la SCJN, lo que representó una reducción del 5.3%. Este recorte se produce en un contexto de ajuste fiscal a nivel nacional, donde se busca un mayor control del gasto público. Para la SCJN, este ajuste significó la disminución de recursos destinados a sus actividades, pero también un esfuerzo por adaptarse a las nuevas condiciones económicas del país.
El Presupuesto de la SCJN en los Últimos Años: Una Tendencia a la Baja
Desde 2018, la SCJN ha experimentado una disminución progresiva en su presupuesto, con recortes en varias partidas, lo que ha obligado a la Corte a optimizar sus recursos. A pesar de esto, la SCJN ha mantenido su compromiso con la transparencia y la imparcialidad en sus decisiones, asegurando que la calidad del servicio judicial no se vea afectada por los ajustes fiscales.
Los Desafíos de la Austeridad en el Sistema Judicial
El recorte salarial y el ajuste presupuestal en la SCJN no son aislados, sino parte de un movimiento más amplio hacia la austeridad en el sector público. Estos cambios reflejan el objetivo de reducir el gasto innecesario y mejorar la eficiencia en la administración pública. Sin embargo, algunos críticos advierten que estos ajustes podrían generar dificultades para la operación del sistema judicial, lo que podría afectar la velocidad y la calidad de los procesos judiciales en el país.
Un Futuro con Desafíos y Oportunidades
La decisión de la SCJN de reducir los salarios de sus ministros y funcionarios, junto con el ajuste presupuestal para 2025, es una respuesta directa a la reforma judicial y a la necesidad de implementar políticas de austeridad. Sin embargo, es fundamental que la Corte siga garantizando la calidad de su trabajo judicial a pesar de los recortes. La eficiencia, la transparencia y la imparcialidad deben seguir siendo los pilares de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, incluso en tiempos de ajuste fiscal.
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