Apenas unos minutos antes de que se discutiera la iniciativa en el Senado de la República, Morena decidió frenar la propuesta para permitir la “cobranza adelantada”, un esquema que habría permitido embargar hasta el 40% del salario de los trabajadores para pagar créditos de nómina.
El retroceso de última hora ha generado una ola de especulaciones. Mientras la oposición denuncia que la propuesta responde a intereses empresariales y bancarios, dentro del mismo partido oficialista hubo presión desde Palacio Nacional para echar atrás la medida.
¿De qué trata la iniciativa de cobranza adelantada?
La propuesta en discusión buscaba modificar la legislación para permitir que los bancos y financieras descuenten automáticamente parte del salario de los trabajadores para el pago de créditos de nómina.
Sin embargo, la iniciativa fue criticada por sectores políticos y económicos, señalando que:
- Podría afectar severamente la economía de los trabajadores al comprometer gran parte de su sueldo antes de recibirlo.
- Crearía una dependencia crediticia con el sector financiero, beneficiando a los bancos a costa de los empleados.
- Violenta el principio de progresividad, al reducir el poder adquisitivo de los trabajadores en lugar de garantizarles una mayor estabilidad financiera.
Incluso la Secretaría de Hacienda, a través de la Condusef, alertó que la iniciativa era contraria a los derechos laborales y a la estabilidad financiera de los empleados.
El origen de la propuesta ha sido señalado por algunos legisladores como un negocio del diputado de Morena y líder sindical Pedro Haces Barba, quien ha sido vinculado con empresas de financiamiento y crédito.
Pedro Haces: ¿política o placer?
En medio de la controversia por la iniciativa de cobranza adelantada, Pedro Haces Barba solicitó licencia en la Cámara de Diputados del 5 al 9 de febrero, sin dar explicaciones sobre su ausencia.
Algunos legisladores han señalado que Haces podría haber viajado a Estados Unidos para asistir al Super Bowl, recordando que en una ocasión anterior votó una reforma sin estar presente en San Lázaro, lo que generó sospechas sobre su participación remota.
Mientras tanto, el escándalo en torno a la cobranza adelantada no ha terminado, pues los intereses bancarios seguirán impulsando la medida y el oficialismo podría reintroducir la propuesta en el futuro.
Monreal y su juego político en la Auditoría Superior de la Federación
Mientras el debate por la cobranza adelantada generaba revuelo, el senador Ricardo Monreal movía sus fichas en la Cámara de Diputados, logrando colocar a varios aliados en cargos clave dentro de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
Entre los nuevos nombramientos destacan:
- José Manuel del Río Virgen, exsecretario técnico de Monreal en el Senado, ahora en la Dirección de Control Interno.
- Nélida Nayethzy Chavero Becerril, encargada de compras y recursos materiales cuando Monreal fue delegado en Cuauhtémoc.
Estos movimientos estratégicos ocurren justo antes de la entrega del segundo informe de auditorías de la ASF, lo que genera sospechas sobre un posible control del senador sobre las investigaciones y supervisiones financieras.
Gastos de la UIF: menú de lujo con dinero público
En otra polémica, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) ha llamado la atención por la adquisición de alimentos premium para sus funcionarios.
De acuerdo con recientes reportes, la UIF licitó la compra de salmón fresco, cortes finos de res, cecina y carne para hamburguesa, entre otros productos.
La noticia ha generado indignación, pues estos gastos se realizan con dinero público, mientras la ciudadanía enfrenta aumentos en la inflación y recortes presupuestarios en sectores clave.
Los lujos en el menú de la UIF contrastan con las crecientes denuncias sobre corrupción y desvío de recursos en el gobierno, lo que refuerza la percepción de que la austeridad no aplica para todos.
Entre presiones y controversias, el Congreso sigue en la mira
El Senado y la Cámara de Diputados han arrancado el año con una serie de polémicas que reflejan el uso del poder para intereses particulares.
Desde la frenada iniciativa de cobranza adelantada, hasta las estrategias de Monreal en la ASF y los gastos en alimentos premium de la UIF, los ciudadanos siguen observando cómo el Congreso sigue tomando decisiones que benefician más a unos pocos que a la población en general.
El reto para la ciudadanía será exigir transparencia, rendición de cuentas y decisiones que realmente protejan los derechos de los trabajadores.
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