Ministros de la Suprema Corte se solidarizan con damnificados por lluvias
La tragedia causada por las fuertes lluvias en México ha dejado imágenes de destrucción, angustia y resiliencia. En medio de este panorama, los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) anunciaron una acción poco habitual: donarán parte de su salario y abrirán centros de acopio para apoyar a los miles de damnificados en cinco estados del país.
La decisión fue comunicada durante la sesión de este lunes por el ministro Hugo Aguilar Ortiz, quien pidió un minuto de silencio en memoria de las víctimas y de las familias afectadas por el temporal que azotó Hidalgo, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí y Veracruz, este último el más golpeado por la emergencia.
Un gesto de empatía desde el máximo tribunal
En un tono solemne, Aguilar Ortiz informó que el pleno de ministros acordó realizar una aportación voluntaria de sus salarios para la compra de víveres destinados a las comunidades afectadas. Aunque no se reveló el monto exacto de la donación, el gesto fue recibido como un acto de solidaridad institucional ante una tragedia que ha conmovido al país entero.
“Vamos a hacer esta aportación en los días subsecuentes”, señaló el ministro, al tiempo que invitó a todos los integrantes del Poder Judicial de la Federación (PJF) —tribunales, juzgados, el Tribunal de Disciplina Judicial y el Organismo de Administración de Justicia— a sumarse a la iniciativa.
Centros de acopio y colectas en todo el país
La SCJN anunció la apertura de centros de acopio en sus edificios principales, ubicados en Pino Suárez número 2 y Revolución, en la Ciudad de México. Desde ahí, se recibirán alimentos, agua embotellada, artículos de higiene personal, ropa, medicinas y herramientas de mano que serán enviados a las zonas más afectadas.
“Principalmente necesitamos agua embotellada, alimentos enlatados, artículos para bebés y productos de primeros auxilios”, precisó Aguilar Ortiz, subrayando que cada contribución puede marcar una diferencia para las familias que lo han perdido todo.
Además, se invitó a los centros de justicia y sedes judiciales en los estados a replicar esta acción solidaria, convirtiendo a todo el Poder Judicial en una red nacional de apoyo a los damnificados.
El Poder Judicial se suma a la solidaridad nacional
La decisión de los ministros llega en un momento en que miles de mexicanos han mostrado su espíritu solidario, organizando colectas y enviando ayuda a las comunidades aisladas por las lluvias. Desde el sector público hasta el privado, el país se ha movilizado para responder a la emergencia.
La Corte destacó que también revisará recursos institucionales disponibles para destinar apoyo adicional a las labores de asistencia. “Vamos a revisar algunos objetos o recursos que tenga la Corte para hacer un aporte solidarizándose con esta lamentable situación”, aseguró Aguilar Ortiz.
Este tipo de acciones humanitarias desde las más altas instituciones del Estado refuerzan la confianza ciudadana en un sistema judicial que no solo imparte justicia, sino que también muestra sensibilidad frente al dolor social.
Un llamado a la unión y la empatía
Más allá de los tribunales y las leyes, la iniciativa de la Suprema Corte envía un mensaje profundo: la solidaridad no distingue jerarquías. En momentos de crisis, la empatía se convierte en una forma de justicia social.
Mientras las lluvias dejan tras de sí carreteras colapsadas, viviendas destruidas y comunidades incomunicadas, la ayuda conjunta del Estado y la ciudadanía ofrece una esperanza. Cada vívere recolectado, cada donación y cada gesto de apoyo reafirma el principio de que México se levanta cuando todos deciden ayudar.
El gesto de los ministros no resuelve los estragos del temporal, pero sí representa un símbolo de compromiso ético y humano desde la cúpula del Poder Judicial. En tiempos de desconfianza institucional, estos actos rehumanizan la función pública y devuelven a la justicia su sentido más esencial: servir al pueblo.
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