El proyecto del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2026 se encuentra bajo la lupa de especialistas que advierten la necesidad de una “reingeniería a fondo”. Durante un foro de parlamento abierto en la Cámara de Diputados, diversos expertos coincidieron en que los recortes presupuestales podrían poner en riesgo la atención de problemáticas urgentes, como la búsqueda de personas desaparecidas, la transparencia gubernamental y la lucha contra la corrupción.
Una crisis forense que requiere acción inmediata
Emanuel Jiménez García, del Consejo Nacional Ciudadano del Sistema Nacional de Búsqueda, fue contundente: el país solo cuenta con 15 mil peritos para analizar más de 72 mil cuerpos sin identificar en morgues.
Alertó que el déficit de recursos podría agravar la crisis humanitaria y demandó que no se reduzcan los subsidios de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), pues su financiamiento impacta directamente en las comisiones locales.
La preocupación crece al conocerse que la CNB recibiría solo 1.2 millones de pesos para 2026, una cifra minúscula comparada con los 23 mil millones destinados a la Guardia Nacional.
Familias y activistas denuncian abandono
Virginia Garay, presidenta de la asociación civil Guerreras en Busca de Nuestros Tesoros, señaló que el número de cuerpos sin identificar aumentó 5.3% entre 2023 y 2024.
Denunció que los recortes comprometen la localización de víctimas, pues las comisiones locales carecen de presupuesto suficiente para realizar búsquedas efectivas y dignas.
“Sin recursos no hay justicia, y sin justicia no hay paz”, expresó Garay frente a legisladores, demandando una redistribución más humana del gasto público.
Corrupción y transparencia: temas en riesgo
Para Anaid García Tobón, experta en asuntos públicos, la situación no es mejor en materia de anticorrupción.
Cinco de las seis instituciones encargadas de investigar irregularidades sufrirán recortes, mientras que la Secretaría de Anticorrupción y Buen Gobierno verá una caída del 2.1% en su presupuesto.
En cuanto a la transparencia gubernamental, el panorama resulta aún más preocupante. El nuevo organismo Transparencia para el Pueblo operará con solo 25 millones de pesos, una reducción del 98% respecto al antiguo INAI, que recibía más de mil millones anuales.
Una llamada a la reingeniería fiscal
Los especialistas coincidieron en que el PEF 2026 no solo necesita ajustes, sino una reingeniería estructural que garantice la distribución equitativa de los recursos.
Recalcaron que la austeridad no debe convertirse en fragilidad institucional, y que es urgente fortalecer las áreas de justicia, derechos humanos y rendición de cuentas.
En palabras de García Tobón:
“Recortar no siempre es ahorrar. A veces es perder lo más valioso: la confianza ciudadana.”
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