El Palacio de Gobierno en Cuernavaca amaneció con un aire solemne pero esperanzador. La gobernadora Margarita González oficializó el nombramiento de Edgar Maldonado Ceballos como nuevo secretario de Gobierno de Morelos, tras la inesperada partida de Juan Salgado Brito, ocurrida el 26 de octubre.
El anuncio marcó un punto de inflexión en la administración estatal. Maldonado, conocido por su perfil técnico y su cercanía política con la mandataria, deja atrás la Fiscalía General del Estado para asumir el segundo cargo más importante del gabinete, encargado de la gobernabilidad, la seguridad y el diálogo con los municipios.
Su llegada no solo representa un cambio de nombre, sino una estrategia para consolidar la coordinación institucional y garantizar la estabilidad política de Morelos en una etapa crucial.
Un perfil con experiencia y lealtad política
Edgar Maldonado no es un desconocido en el escenario político de Morelos. Abogado de formación, ha sido pieza clave en distintos momentos de la trayectoria de Margarita González. Participó activamente en su campaña electoral y, al inicio del sexenio, fue nombrado consejero jurídico del estado.
En febrero de este año, tras la destitución de Uriel Carmona Gándara como fiscal general, Maldonado fue elegido por el Congreso local para ocupar ese cargo, con un periodo de nueve años. Sin embargo, su gestión duró apenas ocho meses antes de ser convocado por la propia gobernadora para un nuevo reto.
La decisión de nombrarlo secretario de Gobierno refuerza la confianza en su capacidad de negociación y en su conocimiento del entramado político y judicial del estado.
Gobernabilidad y seguridad: los nuevos desafíos
El contexto actual de Morelos exige liderazgo y diálogo. Desde su nuevo cargo, Maldonado encabezará las Mesas de Seguridad, espacio clave para coordinar estrategias entre el gobierno estatal y los 36 municipios.
Su principal reto será mantener la gobernabilidad democrática y fortalecer la confianza ciudadana en las instituciones. Además, deberá gestionar la relación con los distintos poderes, partidos y sectores sociales, en un estado que históricamente ha enfrentado tensiones políticas y desafíos en materia de seguridad pública.
El mensaje del gobierno es claro: la estabilidad de Morelos requiere continuidad, comunicación y firmeza. Maldonado llega con la tarea de ser puente entre la política y la ciudadanía, en un momento donde el diálogo es el principal activo.
Un relevo con visión de futuro
La transición en la Secretaría de Gobierno no solo responde a una necesidad inmediata, sino a una visión estratégica de largo plazo. Con Maldonado al frente, la administración busca consolidar un gabinete cohesionado, con experiencia y sensibilidad social.
En su entorno se percibe un clima de colaboración. Los municipios esperan nuevas rutas de coordinación, mientras los sectores empresariales y civiles confían en que el relevo traerá mayor certidumbre.
La historia política de Morelos se reescribe con cada cambio, pero este relevo tiene un sello distinto: continuidad con visión, y firmeza con diálogo.


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